En Pedernales la misa se celebra a las 16:00 en una carpa
Según cuenta el sacerdote José Posligua, varias imágenes de la iglesia del cantón Pedernales, en la provincia de Pichincha, cayeron de pie y se mantuvieron paradas durante el movimiento telúrico de las 18:58 del sábado 16 de abril pasado. Este hecho particular es asumido como una ‘señal divina’.
En Pedernales, pese a la desgracia ocasionada por el terremoto, la devoción por la Virgen María Auxiliadora, la patrona de este cantón, se mantiene intacta, aunque la iglesia de esta ciudad fue seriamente afectada en su estructura por el fenómeno natural. La misa se celebra todos los días, a las 16:00, en una carpa que los sacerdotes improvisaron en un terreno que pertenece a la iglesia.
Los cánticos de alabanza a Dios dan inicio a la emotiva ceremonia, a la que asisten, sobre todo, las mujeres y los niños. “Aquí estamos dando gracias a Dios por estar vivas y por protegernos durante el terremoto. Sé que ya no tengo dónde vivir, pero lo material se vuelve a hacer, lo importante es que estamos vivos”, dice Carmen Chema, habitante de Pedernales. Ella vive, hace más de 15 días, junto a su familia en uno de los cuatro albergues que funcionan en esta zona manabita.
Esta mujer, quien ahora tiene un negocio de venta de jugos de naranja, cuenta que el rostro de la figura de madera de la Virgen María Auxiliadora se dañó por completo, pero el resto de la escultura, que mide más de un metro, se conservó y se encuentra al momento en una de las aulas de catequesis que tiene esta curia, ubicada junto al templo principal.
Así quedó la iglesia central de Pedernales tras el terremoto
Según explica el padre José Posligua, uno de los párrocos de Pedernales, mientras se reconstruye la iglesia afectada, las ceremonias religiosas se realizarán en esta carpa. “La estructura del templo está bien, soportó este tremendo sacudón, pero son las paredes las que se encuentran dañadas, por eso serán derribadas”.
El sacerdote indica justamente que uno de los hechos inexplicables es que “las figuras cayeron de pie durante el terremoto y quedaron paradas”, lo que -como manifiesta el padre- “se ha convertido en una señal divina para los feligreses”.
Añadió que esa ha sido una experiencia que motiva a los habitantes de Pedernales desde el punto de vista de la fe”, así como de la motivación para seguir adelante, pese a la tragedia.
En realidad, para muchos creyentes como Carmen Chema, “esta es una señal de Dios”, una muestra de que él, a pesar de este momento adverso, está con los más necesitados.
Flor García también lo cree así; ella incluso está convencida de que su hijo, el mayor de 16 años, “se salvó por un milagro”, porque después de salir casi ileso del supermercado más grande de Pedernales, pasó cerca de la iglesia y permaneció allí por un largo rato. “Dios me lo mantuvo con vida y ahora estoy en la misa para alabarlo”, destacó.
El padre Posligua, oriundo de Portoviejo, quiere crear una especie de museo para ubicar allí todas las imágenes que se mantuvieron intactas después del terremoto y que fueron precisamente las que cayeron de pie. Son muchas las personas que quieren verlas e incluso tocarlas, pero, por ahora, se mantienen en estas aulas de la iglesia.
El cura indica que hace varias semanas han recibido la ayuda de sacerdotes provenientes de parroquias de Quito, de Ibarra y Santo Domingo. El apoyo más que económico es misionero, evangelizador, porque lo importante –como él señala- es que haya más sacerdotes que se acerquen a Pedernales para llegar a más personas con la palabra de Dios.
Esta ‘cruzada evangelizadora’, como él la llama, también es apoyada por madres religiosas de diferentes comunidades de la provincia de Manabí, quienes se han acercado a esta parroquia para ofrecer su ayuda. (I)
Sector turístico de Atacames busca reactivarse
Las playas del cantón Atacames, en la provincia de Esmeraldas, considerado uno de los principales destinos de los quiteños, no fueron afectadas por el terremoto del 16 de abril; sin embargo, se alejaron los turistas, por lo que esperan reactivarse al igual que lo hace Manabí.
Las autoridades locales, tanto públicas como privadas, relacionadas con el sector turístico, se encuentran coordinando una serie de actividades para recuperar el flujo de visitantes: Pondrán en marcha ofertas especiales en servicios hoteleros, de comida y hasta de transportación.
Sara Moyano, presidenta de la Cámara de Turismo de Atacames, manifestó ayer su agradecimiento a la iniciativa del ‘Tour de la solidaridad’ organizado por el Ministerio de Turismo y Tame, que mañana llevará turistas precisamente al cantón Atacames. “Para nosotros es importante que los turistas vean que en Atacames todo está bien y que estamos listos a atenderlos, especialmente con nuestra gastronomía tradicional, como son los ceviches, filetes de pescado, el encocado, camarones apanados, entre otros”, resaltó.
Daniel Argüello, dueño de un hotel, indicó que esperan que los turistas comiencen a llegar nuevamente, pues requieren que se reactive la economía local.
De igual manera, los dueños de negocios pequeños y comerciantes esperan salir adelante, pues aunque el sismo no afectó la infraestructura en Atacames, Tonsupa y Súa, causó graves pérdidas económicas por el alejamiento de turistas. (I)
Datos
Ayer arribó a Quito un avión de KLM con ayuda humanitaria que será destinada a los habitantes de las diferentes zonas afectadas por el terremoto del pasado 16 de abril.
El Gobierno de los Países Bajos envió en ese vuelo 13 toneladas, que incluyen 1.000 camillas, 1.000 sacos de dormir, 1.000 almohadas, 1.000 kits de aseo y 9 piezas de iluminación.
El delegado del Consejo de KLM indicó que esa línea aérea transporta la donación sin costo alguno, como una forma de hacerse presente para ayudar a los ecuatorianos damnificados.
El cargamento de ayuda fue recibido por el Cónsul Honorario Karel Coors y los representantes de la Secretaría de Gestión de Riesgos de Ecuador, el delegado de la ERCC, Leire Alonso; la primera secretaria Noralma Novoa; y el jefe Oficial de Escritorio de los Países Bajos. (I)