En el cuarto feriado del año los turistas optaron por destinos cercanos. En la Terminal Terrestre de Carcelén, en Quito, las ventanillas que ofertaban pasajes hacia Otavalo e Ibarra estaban saturadas.

Pamela Ziegler, por ejemplo, llegó acompañada de su familia, su madre y un hermano. Tenían previsto viajar a Ibarra para festejar su cumpleaños en casa de otra hermana, radicada en la capital imbabureña.

“Nosotros vivimos en Pifo (nororiente de Quito) y esperamos un bus desde las 08:00, pero todos pasaban llenos. Por eso decidimos venir hasta la terminal, pero ya llevamos una hora en la fila. No pensamos que habría tantos viajeros”.

Las operadoras anticiparon las frecuencias de los viajes para atender la demanda de pasajeros. Hacia Otavalo e Ibarra las unidades salían cada 10 minutos y cada usuario canceló $ 2,50 y $ 3, respectivamente.

Incluso taxistas ofrecían el traslado a la terminal terrestre de Ibarra por $ 12 para 4 pasajeros. Algunos optaron por ese servicio, sobre todo, quienes llevaban a sus mascotas.

En esa terminal operan 480 unidades que cubren distintas rutas, de las cuales el 70% se dirigen hacia Imbabura y Carchi. Cada unidad con un promedio de 45 usuarios.

Otro destino elegido fue  San Miguel de los Bancos (Mindo) y Pedro Vicente Maldonado, a dos horas de la capital. Las compañías Aloag, San Pedrito y Kennedy también adelantaron las frecuencias.

“El jueves no hubo mucha demanda, es que a veces el usuario se confía de que no habrá muchos pasajeros. Hoy ya tenemos copado el cupo hasta las 11:45”, indicó Julio Vera de la Unión de Noroccidente, mientras a su lado voceaban la oferta de pasajes a Babahoyo, Guayaquil, Machala y Huaquillas.

Por el feriado, correspondiente a la Batalla de Pichincha, las carteras de Turismo y del Interior suscribieron un acuerdo interministerial para extender el horario del expendio y consumo de bebidas alcohólicas en establecimientos turísticos y no turísticos hasta las 03:00.

Salinas, el destino principal

El principal destino de quienes viajaron ayer desde Guayaquil fue la Península de Santa Elena. En todo el feriado se estima que unas 188.000 personas saldrán de la ciudad hacia otros destinos en el país. Foto: Alfredo Piedrahíta.

El argentino Rafael Urruty y su esposa, Carla Santillán, decidieron celebrar sus nueve años de casados en Ayangue. Aprovecharon el feriado para viajar al balneario y disfrutar del mar.

“Es un lugar hermoso, con buena comida y una playa en la que los niños se pueden bañar, porque no hay olas”, refirió brevemente este viajero, que junto con su cónyuge es una de las más de 65.000 personas que salieron ayer a los distintos destinos del país por el feriado desde la Terminal Terrestre Jaime Roldós Aguilera de Guayaquil.

El punto al que más viajeros se movilizaron fue Salinas. Cada 10 minutos salieron buses llenos ayer hacia la Península de Santa Elena, destacó Roque Alcívar, propietario de bus, quien ayer estuvo como vendedor de boletos.

Informó que hasta las 10:30 ya habían ido rumbo al terminal de Ballenita 1.400 personas. “El feriado no es como el anterior (el Día del Trabajador), por lo que ese se lo tomó como el cierre de la temporada, pero igual tenemos bastantes personas que viajan con nosotros”.

Otro de los ciudadanos que partió ayer desde la terminal porteña fue José Loor.

“Yo viajo por trabajo  a Portoviejo, pero igual me pego una escapada y trataré de pasear un poco; Manabí es una tierra muy hermosa, tengo que aprovechar que voy para allá, donde además se come muy rico”, indicó Loor.

Según las proyecciones de las autoridades de la Terminal Terrestre, se espera que un total de 188.000 ciudadanos viajen hasta los diversos destinos del país.

El año pasado, en el mismo feriado, la estación de buses acogió a 161.800 viajeros. (I)