Nuevos billetes que restan cinco ceros al bolívar entraron en vigencia el lunes 20 de agosto en Venezuela, primera medida de un plan económico que empresarios y analistas dudan que pueda frenar la devastadora crisis que forzó a millones a abandonar su país.

La puesta en marcha del llamado 'bolívar soberano' está al 100%, celebró el presidente Nicolás Maduro en horas de la noche en un video que difundió por Facebook Live. "¡El sistema bancario se comportó como un campeón!", dijo.

Caracas y otras ciudades estuvieron paralizadas en un día declarado feriado por Maduro para la adecuación de las plataformas en la banca.

En los días previos, marcados por la incertidumbre, hubo compras nerviosas hasta donde aguantaron los bolsillos -golpeados por una hiperinflación proyectada en 1.000.000% para 2018 por el FMI- y también largas filas en gasolineras ante un anunciado aumento de los precios.

El anuncio se hizo el 17 de agosto y ante la incertidumbre de lo que pasaría cuando empezara a utilizarse la nueva moneda, un reporte de la agencia Reuters aseguraba que las filas de los mercados en Caracas fueron más largas el fin de semana pasado de lo habitual.

Uno de sus fotoperiodistas quiso ilustrar con fotografías cómo la hiperinflación se traduce en la economía real: aquello que los venezolanos deben pagar para hacerse con artículos básicos. 

Así, por ejemplo, para comprar un pollo de 2,4 kilos, los venezolanos pueden llegar a pagar 14.600.000 bolívares.

En el caso de la carne, un kilo costó 9.500.000 bolívares en un mercado de Caracas, cuando el salario mínimo hasta el 20 de agosto era de 3.000.000 millones de bolívares (unos $0,89 dólares). 

Una barra de jabón cuesta 3.500.000 bolívares, algo más de lo que antes era el salario mínimo mensual.

Hasta la entrada en vigor del bolívar soberano, el billete de mayor denominación era de 100.000 bolívares, algo menos de $0,3 en el mercado negro.

A partir de ahora habrá monedas y billetes de 2 hasta 500 bolívares soberanos. El más bajo será el equivalente a los 200.000 bolívares vigentes hasta ahora, y el más alto será igual a 50 millones.

Pero el sistema anterior seguirá conviviendo durante un tiempo con el nuevo. (I)