Varios empleados de empresas privadas del país  empezaron a mostrar su malestar luego de cumplirse el plazo para el pago de las utilidades. Además denuncian que muchas compañías no cancelan las horas extras ni beneficios sociales.  

El 15 de abril concluyó el plazo para que las empresas  pagaran las utilidades a los trabajadores por el ejercicio económico 2012.

El incumplimiento del pago de utilidades, horas extras y beneficios sociales, además del “maltrato” que reciben, obligaron a los trabajadores de los almacenes Casa Tosi, ubicados en Guayaquil, a protestar en la vía pública para que se respeten sus derechos.

Los manifestantes pidieron al gerente general de Casa Tosi, Gabriel Colmenar Seminario, que los atienda y dé una respuesta por todos los incumplimientos de la empresa, pero el directivo no aceptó.    

Denunciaron que Colmenar “mandó a decir con una empleada que todos ya están despedidos”. “No nos pagaron ni un centavo por las utilidades, nos hicieron firmar un papel con los saldos de nuestra quincena de abril y eso han presentado como pago de utilidades en el Ministerio de Relaciones Laborales”, aseguró Vanessa Choca, quien labora por más de 5 años en el área de atención al cliente.

Choca mencionó que la semana pasada pusieron la denuncia en el Ministerio y los funcionarios de esta cartera de Estado les señalaron que iban a investigar el caso.

De su parte Janio Criollo, vendedor de Casa Tosi, enfatizó que fueron engañados por los administradores de la tienda, ya que Francesco Zunino, propietario del Banco Territorial,  sigue figurando como dueño de la empresa. “No nos han pagado utilidades, nunca hemos recibido horas extras, el décimo de marzo tampoco fue acreditado. También nos descuentan  la afiliación al IESS y no aportan esos dineros”, dijo Criollo, quien manifestó que nadie de la empresa les da la cara.

Denunció que en enero de este año los directivos del Banco Territorial los obligaron a renunciar a Casa Tosi y pasar a manos de la empresa Pugilato, la cual no consta en los registros de la Superintendencia de Compañías. “Un buen tiempo en Casa Tosi facturábamos manualmente. Los clientes se quejaban diciendo que Pugilato, de la cual  era dueño Zunino, aparecía en el SRI como una empresa agrícola”, dijo  Criollo.      

Recalcó que allegados a Zunino siguen manejando las “riendas de Casa Tosi” y amenazando al personal con despidos y agresiones. “Sara Holm es gerenta de tiendas, y Rody Rentería, ex  custodio de Zunino y enrolado por el Banco Territorial, ahora figura como jefe de las bodegas de electrodomésticos”, expresó Criollo, quien teme que al no contar como trabajador de Tosi, si llegase ésta a ser liquidada por la Superintendencia de Bancos y Seguros, no reciba ningún dinero por la liquidación.

Debido a la presunta vinculación de Francesco Zunino, accionista mayoritario del Banco Territorial en el paquete accionario de Casa Tosi, la Junta Bancaria dispuso al liquidador de la entidad la toma de la administración y bienes de la tienda.

Respecto a la intervención  de la Superintendencia de Bancos en Casa Tosi, Paola Espinosa, del área de ventas, dijo que al momento los funcionarios no se han hecho presentes y los directivos de Casa Tosi están vendiendo rápidamente bienes del Banco Territorial. “Desde el jueves los administradores de Tosi, allegados a Zunino, han sacado cerca de 50.000 dólares en mercadería de todas las tiendas y al momento lo siguen haciendo.

Aduciendo que no tienen plata les están pagando a los proveedores con electrodomésticos, lo cual es falso, sí hay plata, el negocio marcha bien”, aseveró Espinosa.

Incumplimiento

“Jennifer”, quien labora en el hotel Los Pinos, manifiesta que no ha recibido los recursos que le corresponden por sus años de servicio. “Me quieren dar solo 40 dólares por las utilidades de 2012, en una empresa que gana más de 4.000 dólares diarios”, expresó.  

La trabajadora indicó que en años anteriores las utilidades que percibieron por parte de la empresa eran mucho más altas que las que están recibiendo ahora. “Ellos dicen que están en quiebra, pero este año fue muy bueno para ellos. Antes nos pagaban hasta 800 dólares y no es justo lo que nos están dando ahora, es una burla”, indicó.   

Hugo Villacrés, analista económico, resaltó que si una empresa no entrega las utilidades a sus empleados se le cobrará una multa que deberá pagar en el Ministerio de Relaciones Laborales. “En base a las utilidades que debían entregar a los trabajadores se calcula la multa para las empresas, y aparte de eso deberán pagar los recursos a sus empleados lo más pronto posible”, dijo Villacrés.

Sin embargo, explicó que la multa es pagada solo por aquellas empresas que generaron utilidades y que no las distribuyeron entre sus trabajadores.