#SwissLeaks

Un sistema corrupto. Suiza, un paraíso fiscal, está comprometida en un gran escándalo internacional. Una nueva revelación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación revela que la filial suiza del banco inglés HSBC Private Bank, uno de los más grandes de Europa, abrió cuentas a miles de evasores fiscales en el mundo.

Estos documentos confidenciales divulgados a la opinión pública se conocen como los #SwissLeaks. Hay varios problemas por ocultar información fiscal. Por una parte, buena parte de ese dinero tiene un origen oscuro e ilícito. De otro lado, se perjudica a las arcas fiscales de los países y sus ciudadanos, pues menos impuestos implican menos inversión social u obras de infraestructura.

Los SwissLeaks revelan que más de $ 180 mil millones habrían transitado por cuentas de la filial suiza del banco HSBC. Las cuentas eran ocultas en mecanismos offshore en Panamá y en las Islas Vírgenes británicas, con el fin de evadir impuestos. Se trata de una investigación de los fondos de un sistema creado por la sede suiza (HSBC PB) del banco inglés HSBC,  para facilitar e incentivar la evasión de impuestos de al menos 100 mil clientes.

Detrás de estos acuerdos, hay un sistema bien montado que permite estos mecanismos tramposos: los grandes bancos y empresas, los políticos, las firmas de auditoría y los abogados. El escándalo de los LuxLeaks y, ahora de los SwissLeaks, es sintomático de un modelo basado en nichos fiscales que perjudican a otros países y a sus ciudadanos.