Cuatro meses sin poder vender una sola caja de exportación”, dijo don José Guamán Pino sobre como le afecta el hongo de la sigatoka negra a su plantación en el recinto El Descanso de la parroquia Roberto Astudillo (Milagro).

La sigatoka negra es un hongo que apareció en 1987 en Ecuador. Desde esa fecha la plaga se ha extendido a las   bananeras. Esta especie daña especialmente la hoja de la planta, pero si no es contrarrestada la merma totalmente.

La falta de hojas provoca que el banano no alcance los 20 centímetros de largo mínimo requerido para que sea  exportado, en especial en los manojos inferiores del racimo.

Según Julio Cruz Escudero, dirigente bananero de la zona Los Chirijos (Milagro), la producción en las haciendas ha disminuido un 30 por ciento hasta el momento por la plaga de la sigatoka negra. Es por ello que el país hay una oferta de 700 a 900.000 cajas de banano semanalmente, que anteriormente era mayor la producción, que es una de las causas para que suba el precio en el mercado.

Ayer, el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap) entregó los kits de fungicidas de forma gratuita a los pequeños  agricultores de la fruta en la provincia del Guayas. En total se espera que 1.128 propietarios de fincas, de hasta 10 hectáreas, reciban los fungicidas para 4 ciclos y fertilizantes foleares para 2 ciclos.

El viceministro de Agricultura, Luis Valverde, en el momento de entregar los kits de fumigación que es parte de la emergencia bananera, hizo recomendaciones adicionales para evitar que se desarrolle el hongo, como podar las hojas infectadas de forma manual y oportunamente, cortar la maleza que hay en las plantaciones y drenar las aguas que están estancadas, que son causas reales que provocan la presencia del hongo que es endémico en el país y existe en todas las plantaciones. “La fumigación es parte de la estrategia, pero hay que hacer otros esfuerzos”, aseveró el funcionario.

Explicó que el Gobierno conoce del crecimiento de la plaga que fue causada por el fuerte clima del invierno anterior y,   especialmente, afecta a los pequeños agricultores, a quienes se ayuda con los químicos para la fumigación.

El agricultor José Guamán Pino reiteró que hay familiares y amigos que han desistido de combatir la sigatoka y simplemente han “tumbado” la plantación para cambiarse a otro cultivo. “Mire, a mi hermano Arturo fue tal la afectación que decidió cambiar el cultivo de la fruta por el cacao, que no es tan rentable como el banano, pero es mejor que estar peleando con el hongo que pone la hoja primero amarilla y después negra, hasta que mata a la planta”.

Mientras que, Betty Vera Chanasa, propietaria de una plantación en la zona de Milagro, acudió temprano a retirar el kit. En su caso vendió los racimos al Magap, lo que la mantuvo en el negocio en los dos últimos meses. “En este momento hay mejores precios, pero tenemos una afectación de la sigatoka que debemos combatir ahora, para en los meses de noviembre y diciembre vender a buen precio y recuperarnos”, manifestó.

Los kits también se entregaron en la provincia de Los Ríos, en el cantón Vinces, a los miembros de la Asociación de Bananeros de Vinces (Asobavin), que agrupa a más de 35 socios y representan 600 hectáreas.