Sectores de alimentos y bebidas piden revisar restricciones por el feriado de carnaval
La revisión de las medidas de restricción sobre la comercialización de bebidas alcohólicas, así como un espacio en las mesas de trabajo en el COE cantonal de Guayaquil, para diseñar medidas consensuadas en torno a la bioseguridad, son las peticiones que realizan representantes de asociaciones de bares y hoteleros de Guayaquil.
Estas peticiones las formulan delegados de la Asociación de Restaurantes del Guayas, la Red Ecuatoriana de Tenderos, Asociación Hotelera del Guayas y representantes del sector de cervezas artesanales de Guayaquil sobre la medida del Comité de Operaciones de Emergencia de Guayaquil, que prohíbe la comercialización de bebidas alcohólicas y de moderación del 11 al 16 de febrero, entre las 18:00 y 06:00.
Para ellos, el feriado de Carnaval constituía una oportunidad para generar ingresos, por lo que se habían abastecido, invertido en productos y contratado personal para satisfacer la demanda. La medida limita la reactivación e impacta en su cadena de valor compuesta por tenderos, dueños de restaurantes, cocineros, meseros, personal de limpieza, producción, seguridad, entre otros.
Guido Varela, Director de la Red Ecuatoriana de Tenderos, asegura que este tipo de medidas promueve la venta clandestina y atenta directamente con los negocios formales.
“Los restaurantes o tiendas son sitios que no influyen en las estadísticas de contagio actual como sí lo hacen las fiestas clandestinas, los comercios irregulares sobre las calles o las aglomeraciones en el servicio de transporte”, comentó.
Aseguró que actualmente hay de 100 mil tiendas de barrio que se consideran emprendimientos familiares, por lo que esta medida afecta la economía de más de 400 mil personas.
Francesca Ferrero, presidenta de la Asociación de Restaurantes del Guayas, manifestó que su preocupación no solo era como representante de un sector, sino también como ciudadana y como médico profesional.
“Rescatamos la apertura de las autoridades para ser parte de diálogos responsables que ayuden al sector formal a seguir operando. Sin embargo, estas medidas deben ser tomadas con soporte científico, de lo contrario solo se beneficia la clandestinidad y la ilegalidad. (…) Las medidas deberían ir enfocadas en atender las verdaderas causas del problema”
Ferrero asegura que muchos restaurantes debieron recortar hasta un 60% de su personal para seguir operando y que el sector ya cuenta con restricciones como el horario de funcionamiento, límite de personas por mesas y aforo reducido y a esto hay que sumar “el miedo y la crisis económica”.
Juan Zurita, representante de los Cerveceros Artesanales indicó que para su sector los restaurantes y bares representan el 80% de sus ventas constantes: “Hemos tenido un año muy duro y hemos esperado ciertos feriados y fechas especiales para poder sacar adelante la industria. Además de tener responsabilidades con nuestras familias, tenemos responsabilidades con las personas que trabajan con nosotros”.
El sector presentó un oficio a la Dirección Municipal del Turismo del Guayas, en el que pide tener una representación en las mesas de trabajo y toma de decisiones. De esta manera, autoridades y sector productivo puedan definir mecanismos para la reducción de las aglomeraciones, reactivación económica responsable y con todos los protocolos de bioseguridad.
Pedro Iván Serrano, presidente de la Asociación Hotelera del Guayas, coincidió en que se debe trabajar junto con las autoridades, pero piden coherencia para poner normas de control integrales. “Deberíamos tener una representación en el COE para orientar de forma correcta. En nuestro sector cumplimos los protocolos de bioseguridad, adaptando nuestra infraestructura, capacitando al personal, respetando el aforo, entre otras medidas”. (I)