Desde el 18 de mayo de 2020, los emprendedores pueden crear su compañía, sin costo y sin capital mínimo, gracias a la habilitación del nuevo proceso de constitución de Sociedades por Acciones Simplificadas (SAS).

Este es un tipo de compañía cuya flexibilidad permite que se constituya por una o varias personas naturales o jurídicas, a través de un trámite simplificado, directamente en la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros (SCVS).

Con la implementación de esta figura, el Ecuador se une a Colombia, Francia, México, Argentina, países que cuentan ya con este instrumento societario.

Al lunes 8 de junio la Superintendencia de Compañías Valores y Seguros (SCVS) registra 55 SAS inscritas a nivel nacional, informa la Intendente Nacional de Compañías, Dorys Alvarado.

La funcionaria destaca que la Ley de Emprendimiento e Innovación aprobada en febrero de 2020 trae figuras jurídicas como esta para incentivar el desarrollo de los negocios. Además, la Ley de Compañías regula un tipo de compañía con una estructura totalmente flexible, que es distinta a las otras que ya estaban reguladas con otro tipo de connotaciones más formales como las sociedades anónimas o las limitadas.

“Esta herramienta va a incentivar y a formalizar el emprendimiento y a todos los empresarios. Es una figura que se ajusta a la realidad de sus negocios”, afirma Alvarado.

Henry Flores, de la ciudad de Quito, fue uno de los primeros en constituir una compañía SAS. Cuenta que ya tiene otras compañías constituidas, pero esta fue “más fácil que el resto”, debido a que se ahorró los trámites en las notarías, lo cual “es lo más de difícil al crear una compañía”, asegura.

Flores recuerda que “anteriormente los emprendedores gastaban mucho dinero y tiempo en constituir una empresa, y al poco tiempo, si les iba mal, desaparecían. Esta herramienta no asegura que no van a morir, pero al menos no gastan tanto dinero y tiempo”.

Con la implementación de esta nueva figura se busca impulsar el desarrollo del país, mediante el fomento de las actividades económicas individuales y la formalización de los emprendimientos, constituyéndolos en sujetos de crédito y contribuyendo a que amplíen sus procesos productivos.

Una SAS tiene múltiples beneficios para el emprendedor. En primer lugar se puede crear mediante un documento privado, lo cual ahorra tiempo y dinero. No requiere de un capital mínimo y es aplicable a cualquier tipo de actividad mercantil o civil lícita. Adicionalmente, su plazo de duración puede ser indefinido; y la responsabilidad de sus accionistas se limita a sus aportes, protegiendo así su patrimonio, explicó Alvarado.

Esta figura societaria brinda a los empresarios la libertad de fijar las reglas que van a regir el funcionamiento de la sociedad. Están en la capacidad de contar con estatutos flexibles que se adapten a las condiciones y a los requerimientos de cada compañía.

Para constituirla es necesario crear un usuario y contraseña en el portal web de la Superintendencia de Compañías y realizar la reserva de una denominación. También es importante contar con una firma electrónica que se puede obtener por medio del Banco Central del Ecuador o a través del Registro Civil.

Los requisitos y pasos para crear una SAS se encuentran publicados en el portal web de la entidad de control www.supercias.gob.ec, en la opción SAS Sociedades por Acciones Simplificadas. (I)