Ruta Guayaquil-Santa Rosa, entre las más costosas

Cuando se adquiere un boleto aéreo no solo se paga a la compañía por un servicio de transporte, pues dentro del costo final están incluidos 2 impuestos: la tasa de seguridad y de salida de pasajero. El valor de estos tributos dependen de cada Cabildo en el caso de los aeropuertos concesionados de Quito y Guayaquil. Los restantes se sujetan a las directrices de la Dirección de Aviación Civil. A estos valores se agrega el 12% de IVA.

En un ejercicio de compra de tiques por internet quedan claros estos rubros. Si la tarifa de un vuelo Guayaquil-Quito en TAME es de $ 52, el pasajero pagará $ 77,24, ya que por suplementos se hará un recargo de $ 11 y por impuestos $ 14,24. En el caso de LAN, en la misma frecuencia, con una tarifa de $ 90, le cobrarán $ 17,62 adicionales y el costo final será $ 107,62. Las 2 tasas representan entre el 15% y 35% del valor del boleto.

Patricia Miño, presidenta de la Asociación de Representantes de las Líneas Aéreas en Ecuador (Arlae), dijo que las personas creen erróneamente que si un pasaje cuesta $ 200, esa cantidad es la que va a la compañía como parte de su rentabilidad, cuando una parte es destinada a los impuestos.

Ángel Córdova, gerente general de Tagsa, concesionaria del aeropuerto José Joaquín de Olmedo de Guayaquil, explicó que en esta terminal el año pasado se recaudaron $ 1’614.275 por tasa de salida de pasajeros y $ 5’433.672,30 por la de seguridad.  

El 49,75% del dinero es destinado a la concesionaria y el 50,25% al Municipio y este, a su vez, transfiere una cantidad al fideicomiso creado para la construcción del nuevo aeropuerto en Daular.

El tipo de tasas son los mismos en el aeropuerto Mariscal Sucre de Quito, ubicado en Tababela, pero el monto cambia. Este diario se comunicó con Quiport (concesionaria de la terminal Mariscal Sucre), pero allí se dijo que la empresa no maneja tales valores. En el aeropuerto de Cuenca no se dio información.

Desde la semana pasada el Estado busca la forma de regular los precios de los vuelos domésticos a través de un proyecto que reforma la Ley de Turismo y de Aviación Civil, presentado en la Asamblea Nacional. Entre las razones de la iniciativa, según los asambleístas, está la “especulación” de los precios, vinculados a temas como las temporadas y el momento de la compra (tarifas diferenciadas).

Expertos en temas aeronáuticos consideran que el proyecto es contraproducente para el sector, ya que limitaría el acceso a este transporte.

Miño recordó que las tarifas altas que se cobran en los vuelos a última hora son las que compensan las promociones y los precios bajos, y esto hace que la gente tenga mayor accesibilidad al servicio aéreo. “Se trata de un tema de mercado, con esos $ 300 del que pagó más, puedo dar una tarifa de $ 60 al que no puede pagar”, apuntó.

El proyecto hace referencia a lo costoso de los vuelos, particularmente de Galápagos hacia el continente. Por ejemplo, en TAME, para el sábado, un vuelo desde San Cristóbal hasta Quito tiene un costo de $ 217,56 (incluido los impuestos). Para hoy, entre los vuelos más caros figuran Guayaquil-Manta ($171,24) y Guayaquil-Santa Rosa ($ 205,59).

Esta última frecuencia tendrá el mismo costo el 3 de junio, según la página web de la aerolínea.

¿Por qué tan caro? Depende de varios factores, observó Miño, quien recordó que las compañías deben cubrir costos operativos como el estacionamiento de las naves hasta el uso de las mangas para trasladar a los pasajeros de la sala de embarque al avión. El 34% de los costos se utiliza en combustible.

Según los autores de la iniciativa, la variación de las tarifas en el tiempo estaría reñida con la Ley Orgánica de Defensa al Consumidor, cuyo artículo 17 establece que es obligación de todo proveedor entregar al consumidor información veraz, suficiente, clara, completa y oportuna de los bienes o servicios ofrecidos, de modo que este puede realizar una elección adecuada y razonable. (I)

DATOS

Según Arlae, las tarifas en Ecuador no son tan altas comparadas con otros países. De Medellín a Bogotá (Colombia) cuesta $ 90,27 y con 15 minutos más de vuelo.

TAME tiene un rubro denominado suplementos que, según el call center de la aerolínea, corresponde a tasas aeroportuarias y un desglose de los impuestos.

El proyecto de ley para fijar tarifas señala que los costos de los vuelos son impredecibles y están sujetos a la demanda, horarios, clima, cambios de documentos, entre otros.

En el artículo 1 del documento consta que el Consejo Nacional de Aviación Civil establecerá mediante resolución la tarifa fija de las rutas internas.