Cuatro trabas al crecimiento económico y productivo de la región halló el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) en el Reporte de Economía y Desarrollo (RED 2018) difundido en Quito el 13 de noviembre.

Estos frenos, no ajenos a Ecuador, se refieren a competencia, acceso a insumos, sistemas financieros y el mercado laboral, explicó Fernando Álvarez, director de Investigaciones Socioeconómicas del organismo.

Obstáculos en esos aspectos han causado que la región enfrente 60 años de retraso en comparación a países desarrollados. “En 1960, el PIB per cápita de Ecuador era de aproximadamente el 15% del de EE.UU. y hoy es prácticamente lo mismo. El principal responsable es la poca productividad”, dijo el investigador.

En este sentido, Álvarez, dio recomendaciones para que los países formulen políticas encaminadas a aumentar la productividad.
Reducir las barreras para la entrada de empresas es una de ellas. También debe facilitarse el acceso a insumos (materias primas) y servicios como electricidad, transporte y aduanas, mediante inversión estatal, pero también mediante alianzas público-privadas.

“Los sistemas financieros de América Latina son los menos desarrollados frente a economías similares”, apuntó el economista. Considera que las políticas públicas deben aumentar el volumen de crédito y promover tasas de interés más bajas.

Finalmente, el organismo recomienda revisar las normas laborales, sobre todo para la contratación y despido del empleado, ya que “limitan la creación de empleo formal. La legislación debe proteger al trabajador y no al puesto de trabajo”, mencionó Álvarez.

Por ello sugiere fortalecer los seguros de desempleo y mecanismos de acompañamiento a las personas que buscan un trabajo.
Con el reporte, CAF hace un llamado a un consenso entre los países para promover la productividad.

Casos de éxito de Ecuador

El RED 2018 destaca dos iniciativas del país que, desde los sectores público y privado, han aportado a la productividad y han recibido apoyo de CAF.

Pronaca, cliente principal de la producción local de maíz, comenzó a ofrecer crédito para que los productores iniciaran sus ciclos de cultivo y posteriormente pagaran con la cosecha. Su paquete de apoyo incluye asistencia técnica y compra de cultivo.

Hasta 2016 se beneficiaron 600 productores y su productividad se ha triplicado. Otra iniciativa es el Plan Nacional de Semillas de Alto Rendimiento del Ministerio de Agricultura y la participación de la firma Ecuaquímica.

La empresa, gracias a un crédito del organismo, financió la compra de maíz a pequeños y medianos productores, lo que contribuyó a incrementar el alcance del programa a 7.000 productores.

El proyecto además mejoró el acceso de los agricultores a titulación de tierras, insumos y asistencia técnica en el campo. (I)