Quingeo forma una red para llevar alimentos frescos a zonas urbanas
La cuarentena para evitar la propagación del coronavirus, que incluyó restricciones de movilidad y toque de queda, puso contra la pared a los pequeños productores del país.
Al no poder sacar sus productos a los mercados temían perder todo, pero en ningún caso dejaron que sus percepciones nublen las posibilidades de negocio.
En Azuay, los campesinos de la parroquia Quingeo se organizaron con la ayuda de la Junta Parroquial y formaron una red que les permite abastecer a Cuenca con productos frescos.
Quingeo está cerca de Cuenca y depende de los ingresos de la agricultura y la ganadería, por lo que la población está organizada en asociaciones de productores agroecológicos.
Son 21 organizaciones con personería jurídica, con 245 productoras, las cuales hasta antes de la crisis sanitaria comercializaban de forma individual en los mercados de la capital azuaya.
“Con la crisis la forma de comercializar cambió completamente”, comenta Darwin Chillogalli, presidente de la Junta Parroquial.
La canasta que ofrecen los agricultores de Quingeo tiene 24 productos: cebollín, cilantro, tomate riñón, perejil, apio, col, col morada, brócoli, coliflor, espinaca, zanahoria, remolacha, rábano, lechugas, acelga, ajos, hierbas aromáticas, zuquini, zambo, mote (maíz), 1 libra de quesillo, 10 huevos y su costo es de $ 16.
El cliente tiene la opción de agregar extras que incluye: papas, pollo y cuy pelados, así como granos cocinados.
La entrega se realiza dos días a la semana.
En principio se entregaba los miércoles y sábados, pero por motivos de movilización y solicitudes de los consumidores ahora se realiza los martes y viernes.
Chillogalli informa que por día se entregan entre 30 a 45 canastas, la movilización y logística está a cargo de la Junta Parroquial.
Hasta el momento se han distribuido 331 canastas lo que ha significado para la economía de los campesinos un ingreso de $ 9.268.
En Pichincha operan 13 asociaciones
Con la emergencia sanitaria nació una iniciativa similar en Pichincha, donde 13 asociaciones (94 personas) de la agricultura familiar y campesina de Cayambe, Pedro Moncayo, la comuna el Marco, de Rumiñahui; y, Aloasí, de Mejía, se organizaron para llevar canastas con productos orgánicos a distintos sectores de Quito.
El sistema de los productores de Pichincha, apoyados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), permite la entrega puerta a puerta en la capital, comenta Daniela Burbano, técnica de la Subsecretaría de Agricultura Familiar y Campesina, del MAG.
Burbano explica que cada semana se actualiza la oferta productiva de las asociaciones, puesto que los productores no disponen todo el tiempo de los mismos productos. La entrega de las canastas cubre todos los sectores de Quito y sus alrededores, y se entregan los miércoles, jueves o viernes.
El Oro y Guayas también se unen
En la provincia de El Oro, en el sur del país, ocurre algo similar a Azuay y Pichincha, aunque aquí los pequeños agricultores solo cuentan con una asociación.
Los campesinos de barrios como Porotillo, El Guayabo y El Trapiche se unieron y juntaron sus producciones para llegar hasta los centros urbanos más cercanos.
Al igual que los productores de Pichincha reciben los pedidos por teléfono y llevan las canastas hasta los domicilios, contó Freddy Motoche, del sector del Porotillo, cantón Portovelo.
En Guayas, en cambio, los arroceros no han parado sus labores para no permitir el desabastecimiento de la gramínea en los mercados del país, especialmente de Guayaquil.
Incluso, el martes pasado, el vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, y el ministro de Agricultura, Xavier Lazo, recorrieron el sector de Salitre, donde agradecieron a los campesinos por permitir que los ecuatorianos cumplan con la cuarentena por la crisis sanitaria sin problemas de abastecimiento. (I)