Para 2013, la papa, el fréjol y el maíz  blanco  son los nuevos cultivos que el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap) incluirá en el  programa nacional de mejoramiento de la productividad, que consiste en entregar semilla certificada de alto rendimiento a los pequeños agricultores.

Actualmente, los productores de maíz amarillo duro y el arroz  ya reciben los kits de alta productividad subsidiados por el Gobierno.

La directora de Comercialización del Magap, Carol Chehab, señaló que será a finales de 2013 que incluirán en el plan Nacional de Semillas a estos tres productos que tienen una alta demanda a nivel nacional.

El Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias  (Iniap) y trabaja en el proceso de obtener estas semillas.

“Al momento desarrollamos el proceso con las semillas y empezaremos la entrega con el mismo sistema de subsidio, la estrategia de asesoría  y el acompañamiento se mantendrá”, dijo.

Chehab recordó que en el país está en marcha el programa de mejoramiento de productividad del maíz duro amarillo y el arroz. En el primer caso se otorgarán semillas de alto rendimiento para un total de 74.000 hectáreas y en el segundo, para 10.000  hectáreas.

El Magap entrega 123 dólares como subsidio para el   arroz. Un kit cuesta de 445 a 500 dólares en el mercado. La intención es  incrementar la productividad de 3,5 toneladas a 6 toneladas por hectárea.

Para el maíz hay una importación del 85% de las semillas y el otro 15% proviene de los laboratorios del Iniap. El kit en este caso tiene un subsidio de 214 dólares que en el mercado se lo encuentra entre 440 y 600 dólares. El objetivo es incrementar la productividad de 3 a 5 toneladas por hectárea.

La funcionaria reiteró que en los casos de las nuevas semillas que integrarán el plan de mejoramiento de la productividad, así como en el arroz y el  maíz amarillo, hay un seguimiento por parte de los técnicos del Magap que proporcionarán asesoramiento a los agricultores con la finalidad de que los objetivos propuestos sean un éxito.

Resultados positivos

Chehab opinó que gran parte del éxito se lo debe a los agricultores, porque ellos con las buenas prácticas podrán alcanzar la meta que desea el Gobierno y que va en beneficio de la economía de los productores, con mayores ingresos y alcanzado mejores estándares de comercialización en el país.

El director provincial del Iniap, Carlos Cortés, manifestó que las semillas que se producen son  de alta rentabilidad, por ejemplo, en el caso de la gramínea proviene del Fondo Latinoamericano de Arroz de Riego (FLAR) que pertenece a las entidades arroceras de Suramérica y el Caribe.

Agregó que el Iniap es socio de este fondo que trabaja principalmente en el mejoramiento genético, con materiales de arroz superiores que son evaluados en las principales zonas arroceras del país.

“Este material, que es un grano extra largo y cristalino,  es el tipo que prefieren los ecuatorianos y con el cual la industria puede competir en los mercados internacionales”, manifestó.

Reveló que el trabajo de rendimiento por hectáreas viene acompañado de  la tecnología para que aplique el agricultor.

Indicó que dado el impulso que el Magap ha proporcionado para el consumo de semillas certificadas se ha logrado que el 25% provenga  de aquí. Ahora se puede  decir que en   el país el 80% de la superficie sembrada es con variedades del Iniap.

Lo importante es que, además de las semillas, se proporcione la capacitación de cómo mejorar la productividad, a veces, la mejora de la tecnología no implica mayor gasto, sino que se haga un  adecuado uso de los recursos.

En algunos casos hemos visto que los productores usan en excesos los fertilizantes.
Carlos Limbero, productor de maíz, observó con beneplácito la decisión del Gobierno, sobre todo del uso de semillas de alto rendimiento y la canalización de apoyo técnico.

“El próximo año debe ser marcado como de crecimiento para el sector agrícola que redundará en el beneficio de miles de familias que tienen como único sustento las actividades que genera el agro”, expresó.