Un total de 56.360 refrigeradoras viejas fueron reemplazadas a nivel nacional y se entregaron nuevos artefactos a igual número de personas, registradas en el Plan Renova.

Renova es un proyecto de eficiencia energética que permite remplazar congeladoras ineficientes que por su tecnología antigua consumen mayor energía en el hogar.

Los equipos viejos de línea blanca fueron retirados y sometidos a proceso de chatarrización a través de una gestión adecuada de gas refrigerante, informó Carlos Dávila, subsecretario de Energía Renovable y Eficiencia Energética.

El funcionario anunció este resultado como parte del proceso de transición de la matriz energética. Otro de los pasos para alcanzar este proceso consiste en conocer el potencial de biomasa (fuente de energía renovable proveniente de residuos de materia orgánica), que tiene el país.

Por ello se presentó ayer el Atlas Bioenergético del Ecuador, a cargo del Ministerio Coordinador de Producción, Empleo y Competitividad; de Electricidad y Energía Renovable y del Instituto Nacional de Preinversión (INP).

A través de la publicación se identificó el potencial bioenergético del Ecuador, que se deriva de los recursos agrícolas, forestales y pecuarios, detalló Santiago Medina, representante del INP.

Dávila explicó que la localización de las fuentes de biomasa es una clave para apoyar el cambio de la matriz energética, cuya meta es reducir el uso de combustibles fósiles.

Hay 3 sectores donde se pueden encontrar estos recursos. El primero es el sector agrícola, donde se identificaron 10 productos con este potencial (banano, arroz, cacao, caña de azúcar, maíz, palma africana, piña, café y plátano).

El segundo, el sector pecuario (ganadero), donde se encuentran los residuos (estiércol) asociados a la cría de bovinos, porcinos y aves.

El tercero es el forestal. Ahí los potenciales generadores de biomasa son los residuos de los bosques implantados de eucalipto y pino. (I)