La desactivación de cuentas de dinero electrónico avanza de acuerdo con el cronograma establecido por el Banco Central del Ecuador (BCE).

Según el calendario, hasta el 28 de febrero funcionarán cuatro de los servicios de la plataforma. El proceso terminará por completo el 16 de abril. Luego de esa fecha el proyecto del BCE desaparecerá. (Ver infografía)

Hasta diciembre de 2017 el sistema registraba 409.999 cuentas con un monto total transaccionado de $ 65 millones entre 2015 y 2017.

Los usuarios de dinero electrónico tienen tres opciones para gestionar sus recursos: consumir en establecimientos que autorizados, pueden transferir a su cuenta de ahorros o corriente, o descargar los fondos en cajeros automáticos alrededor del país.

Esto último se puede hacer en los bancos Pacífico e Internacional agencias del Banco Central del Ecuador, BanEcuador, Banco del Austro, Banco CoopNacional, Mutualista Imbabura, Mutualista Pichincha; Almacenes Tía, Servipagos, Pago Ágil, Red Facilito y  ventanillas de 40 cooperativas de ahorro y crédito (la lista completa está en la página www.efectivo.ec).

Un total de $ 10,4 millones están acumulados en las cuentas todavía activas, según el  Boletín Monetario Semanal #576 del BCE con corte al 16 de febrero.

Para descargar dinero el usuario primero debe activar su cuenta marcando *153# desde un teléfono celular, seleccionar la opción ‘Descargar’, ingresar el monto y confirmar la transacción con la clave personal. Recibirá un código que dura cuatro horas.

A continuación debe acercarse a un centro de transacción o cajero automático, ingresa la cantidad a retirar, el número de teléfono celular y cédula de identidad, y por último digitar el código.

La desactivación del dinero electrónico administrado por el Banco Central fue aprobada en la Ley de Reactivación Económica (diciembre 2017).

El propósito es que sea el sistema financiero nacional (banca pública, privada y cooperativas de ahorro y crédito) el que provea a la ciudadanía con servicios que impulsen el uso de medios electrónicos de pago, con el fin de disminuir la circulación de dinero físico.

La norma estableció un plazo de 90 días para que el sistema deje de funcionar.

En su lugar las entidades financieras pondrán a disposición del público plataformas de billetera virtual u otras afines.

La Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca) creó BIMO (billetera móvil) que estará operativa después del 16 de abril.

Mientras tanto las cooperativas están adaptando sus servicios respaldándose en la tecnología que utilizaba el Banco Central.

El dinero electrónico apareció en 2014 con el Código Orgánico Monetario y Financiero, pero no logró consolidarse por dudas en cuanto a su respaldo y temores de que pudiera convertirse en una moneda paralela. (I)