Los silos de la UNA serán destinados solo para maíz
En las 5 plantas que tiene la Unidad Nacional de Almacenamiento (UNA) hay una capacidad de acopio en total de 51 mil toneladas que a esta altura del año está siendo utilizada para almacenar el maíz amarillo que compran a los productores.
El gerente general de la UNA, Mao Lam Palacios, explica que esta capacidad de acopio la pueden utilizar, dependiendo de la necesidad para maíz o para arroz. “Es una ventaja que técnicamente se pueda hacer y aquello permite una cierta flexibilidad. Por ejemplo, en este año no hemos tenido la necesidad de usar esa capacidad de almacenamiento para el cultivo del arroz”.
Las inundaciones han provocado una afectación en la cosecha de invierno del arroz, por lo que en esta ocasión no hubo tal situación de excedentes y lo que sale de los campos cubre la demanda interna del país. Es esta situación que ha hecho que la UNA no tenga que intervenir fuertemente en este producto. Y eso permite que toda la infraestructura sea utilizada para el maíz, anota.
Dijo que en este año el acopio esperado no será inferior a las 80 mil toneladas de maíz. El año anterior se captó apenas 11 mil toneladas, “por lo que esperamos un incremento de 8 veces lo almacenado el año anterior.
En el momento que llega el maíz a la UNA se hace un análisis de humedad e impurezas y cualquier agente biótico, sea hongos, insectos o enfermedad. Con esa calificación se hace la recepción y se aplica la transformación a seco y húmedo. Y es en ese momento cuando el agricultor sabe el peso que tiene y el dinero a recibir.
Este servicio es gratuito en los centros de acopio que tienen convenio con la UNA y que están en las provincias de Guayas y Los Ríos. Son 15 puntos que prestan el servicio de limpieza del grano de forma gratuita. En lo silos de la UNA el costo es de 40 centavos de dólar.
Carlos Murillo, presidente de la Federación Nacional de Maiceros (Fenamaiz), califica el servicio de la UNA como muy oportuno para los agricultores que tienen escasa infraestructura. Sin embargo, el problema es la demora que hay en el pago por el producto. “Hay reportes de que la situación de demora en el pago llega hasta un mes en la jurisdicción de Ventanas”.
Justifica que es esta la situación por la cual los intermediarios siguen prosperando con el pago del quintal hasta en 9 dólares. “Ellos pagan en el momento; no hay que esperar, incluso hay quienes les ponen el transporte para sacar el grano desde la finca, claro que también lo descuentan. ¿Y qué puede hacer un agricultor? En ese momento no le queda otra que ¡abocarse a vender!”, reflexiona.
Henry Prado, maicero de la zona de Echeandía, precisó que el servicio de la UNA es positivo para mantener el precio oficial de $ 16,50 al grano con 13 por ciento de humedad y uno por ciento de impureza. “Es una medida positiva que ayuda a que el precio oficial sea respetado y no se siga pagando valores irrisorios a los productores”, anota.
Sin embargo, la posición de lucrar de los intermediarios es casi imparable. A lo largo de la vía hay una docena de centros de acopio que hacen lo que más les place.
A ellos no les importa que el grano esté limpio, con poca humedad, bien tratado. Pagan lo que quieren, denuncia el agricultor. Por ello pide la intervención de la Intendencia de Policía para que haga inspecciones constantes.