Los precios de los productos se recuperaron en diciembre
Después de tres meses consecutivos con inflación negativa, el índice de precios al consumidor (IPC) de diciembre resultó en 0,18%, de acuerdo al reporte divulgado ayer por el (INEC) Instituto Nacional de Estadística y Censos (ver infografía).
Es decir que en el último mes de 2017 los precios de bienes y servicios en el mercado aumentaron.
Santo Domingo fue la ciudad en donde existió mayor crecimiento, con el 0,32%, mientras que Cuenca registró -0,24%. Guayaquil y Quito presentaron 0,23% y 0,20%, respectivamente.
Productos de alimentos y bebidas fueron los que más contribuyeron al IPC con 0,0863%; seguidos de actividades de recreación y cultura 0,0725%.
El año pasado la fluctuación de los precios en total tuvo cinco meses negativos, llamando la atención de comerciantes y autoridades.
Carlos de la Torre, ministro de Finanzas, explicó a EL TELÉGRAFO en un entrevista el 28 de diciembre, que el país experimentaba una situación muy particular.
“Estamos en una etapa deflacionaria pero con una aceleración del crecimiento de la economía, esto es completamente atípico frente a la teoría convencional”, señaló, resaltando que aquello favorecía al país.
La reducción de valores estaría obedeciendo, prosiguió el Ministro, a una acumulación de inventarios que, “por una inadecuada definición de precios en un contexto recesivo, no se vendieron”. “Para que esos inventarios se reduzcan simplemente tienen que bajar los precios”.
De la Torre también lo atribuyó a una demanda que supera la absorción de esos inventarios “y por eso estamos viendo también crecimiento económico”.
La gerente del Banco Central del Ecuador (BCE), Verónica Artola, apoyó esa tesis asegurando que lejos de haber deflación por una contracción en la demanda, las cifras oficiales demuestran que el consumo de los hogares creció 5,3% en el tercer trimestre de 2017.
Tener inflación negativa contribuye a mejorar el poder adquisitivo de las personas, permitiéndoles adquirir más bienes o servicios.
Pero en el contexto de recuperación que vive Ecuador, el problema está en la industria porque la baja de precios no es efecto de una reducción de costos y mayor producción. Artola informó que junto al INEC se evaluará cada una de las variables, dado que el Gobierno también maneja la hipótesis de excesos en los márgenes comerciales.
Si bien las cifras del tercer trimestre reflejan mayor dinamismo en el consumo de las familias, Wilson Araque, director del Observatorio de la Pyme de la Universidad Andina Simón Bolívar, reparó en que en 2016, la falta de recursos en la ciudadanía desaceleró la demanda y obligó a las empresas a disminuir los precios mediante promociones o descuentos.
Eso reactivó el consumo que hoy se muestra, lo cual no implica que se encuentra en su mejor momento, indicó Araque.
La inflación de diciembre no causa sorpresa, agregó, pues los trabajadores reciben el decimotercer sueldo, además de su remuneración habitual. Así tienen más dinero para gastar.
A criterio de Araque, el consumo disminuirá en enero y se mantendrá cauto hasta abril, porque existe incertidumbre en el campo productivo y en la ciudadanía por los resultados de la consulta popular del 4 de febrero. (I)
Sueldo básico
Canasta familiar básica
→La canasta familiar básica nacional (CFB) en diciembre se ubicó en $ 708,98. El ingreso familiar mensual está en $ 700, en un hogar de 4 miembros con 1,6 perceptores del sueldo básico. Existe una restricción de $ 8,98 frente a la canasta.
9 ciudades fueron analizadas. Se recogieron 25.350 datos de un conjunto de 359 productos.
Revisión de costos
→El contexto de la inflación negativa debe ser aprovechado para analizar los costos de producción en las industrias, dijo Araque.