Los mineros artesanales buscan reducir pérdidas
Una minería social, ambiental y económicamente justa es el principal objetivo de la regularización de los mineros artesanales, que empezó en el 2010 y ha dado paso a la legalización de 1.349 labores artesanales. Así lo manifestó el titular del Ministerio de Recursos Naturales no Renovables (Mrnnr), Wilson Pástor.
El Ministro aseguró que el Gobierno, con el propósito de dar cumplimiento a la disposición transitoria 8va de la Ley de Minería, trabaja arduamente en la transformación de este sector.
Recalcó que en los sectores de extracción aurífera como Nambija, Zaruma y Río Santa Bárbara, entre otros, la situación es crítica por la falta de toma de decisiones para el cuidado del ambiente y de sus trabajadores.
En estos lugares no se cumpliría con el objetivo del régimen, según Federico Auquilla, viceministro de Minas, quien aseguró que se “busca fomentar el desarrollo del sector minero en función de los intereses nacionales, promoviendo una minería económicamente viable, socialmente justa, ambientalmente responsable y técnicamente desarrollada (...)”.
Auquilla informó que durante las inspecciones observó que los mineros artesanales recogen el material con herramientas rudimentarias y equipos simples, tienen largas jornadas de trabajo para sacar el mineral. A menudo trabajan en grupos informales y se reparten las ganancias del oro que hayan encontrado.
Además, se observó el uso de baja tecnología, sin seguridad industrial ni control sanitario, ni de salud de los trabajadores, carencia de técnicos, bajo rendimiento en la producción, inestabilidad y rotación de la fuerza de trabajo, bajos salarios, baja capacidad de inversión, escasa inserción legal e institucional. Esos son los múltiples problemas que tienen los mineros artesanales, según Humberto Asanza, minero del cantón Paquisha, en Zamora Chinchipe, quien enfatizó que tienen un sistema caduco y rudimentario de trabajo.
Asanza explicó que estas malas prácticas hacen que la recuperación del mineral sea menor al 40%, “el resto es desperdiciado en ríos y quebradas, lo cual afecta al ecosistema”.
Además, dijo Asanza que en su sector son alrededor de 200 personas que buscan regularizarce, tras señalar “hay que ser honesto con uno mismo, no hacemos conciencia de lo que realizamos”, por lo que comparte con el régimen que se trabaje en la aplicación de una minería responsable y amigable con el ambiente.
La semana pasada se dio la regularización de 224 mineros artesanales de Zamora Chinchipe.
Jorge Esparza, minero de la zona de Yantzaza, dijo que fue importante recibir los permisos por hasta 10 años para la extracción minera, pero también requieren de capacitación para evitar la contaminación de ríos y el bosque. “
Requerimos de un crédito y del permiso para el ingreso de maquinaria ya que en los ríos existen rocas grandes y con las manos no podemos trabajar, queremos que el gobierno nos otorgue los préstamos”, resaltó Esparza.
Para que esto se pueda dar, informó Auquilla, deben asociarse y formar parte de la pequeña minería y así obtener la licencia para la utilización de maquinaria, tras resaltar que los pequeños mineros serán capacitados “respecto a la normativa legal, geología, minería, recuperación de minerales, utilización de químicos, seguridad minera, aspectos socio-ambientales, entre otros temas”.
En julio de 2010 el Mrnnr y el Banco Nacional de Fomento (BNF) firmaron un acuerdo para entregar créditos a los mineros artesanales y pequeños mineros con el fin de apoyar su desarrollo.
Mientras tanto, Nelson Ordóñez, otro de los mineros amazónicos, indicó que el ingreso de maquinaria es importante para ellos “para poder mejorar nuestra capacidad de producción y reducir el porcentaje de desperdicio del mineral a explotar”.
Hasta la fecha se han regularizado 24 labores mineras de Guayas, Bolívar, Manabí, Santa Elena y Los Ríos; y 232 en Esmeraldas, Azuay, Loja y otras provincias.
De acuerdo con la Ley de Minería, una mina artesanal es aquella que mantiene un capital inferior a los $ 36 mil (solo utilizan herramientas, máquinas simples y portátiles), aunque puede llegar hasta 72 mil dólares (300 remuneraciones básicas unificadas) si se trata de una asociación de tres o más mineros.