Entre diciembre de 2015 y el mismo mes de 2016 la tasa de desempleo en Ecuador pasó de 4,8% a 5,2%. Esta cifra mantiene al país con el porcentaje más bajo de la región (ver infografía). Así lo reveló la última Encuesta Nacional de Empleo y Desempleo (Enemdu) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) que incluyó a 31.092 hogares.

David Vera, director de esta entidad, indicó ayer en una rueda de prensa que el aumento de 0,4 puntos no es una diferencia “estadísticamente significativa”. Además expuso otros detalles de los más recientes indicadores del mercado laboral.

La cifra del 5,2% contrasta con las estimaciones del Banco Central del Ecuador (BCE) respecto a que en 2016 el Producto Interno Bruto (PIB) decrecería en 1,7%. También intervinieron los ministros de Trabajo, Leonardo Berrezueta; Política Económica, Diego Martínez; y el viceministro de Inclusión Económica y Social (MIES), José Martínez.

Leonardo Berrezueta remarcó que es una tasa “absolutamente estable”, tomando en cuenta que el contexto internacional afectó a la economía local en los dos últimos años.

La situación es considerada el choque externo más duro que ha experimentado el país en 29 años, agregó Diego Martínez, al tiempo de mencionar que ante esas circunstancias los esfuerzos del Gobierno se concentraron en mantener el empleo existente y sostener los índices de pobreza.

El titular de Trabajo aseguró que de no haberse implementado una serie de medidas de orden económico y laboral, lo más probable es que el porcentaje de desempleo habría sido superior.

En 2016 el desempleo nacional tuvo un promedio anual de 5,4%. Marzo fue el más crítico con 5,7%. Ese mismo mes la Asamblea aprobó la Ley de las Reformas Laborales que permite modificar la jornada laboral, brinda incentivos a las empresas para la contratación de jóvenes y creó el Seguro de Desempleo.

Cerca de 40.000 personas se beneficiaron con la normativa. Según datos proporcionados por Berrezueta, a noviembre de 2016, 7.000 trabajadores tienen jornada reducida o prolongada; 28.000 han accedido al Seguro de Desempleo y se han celebrado 2.000 contratos juveniles.

A través del programa Socio Empleo, administrado por el Ministerio de Trabajo, 15.000 ciudadanos obtuvieron trabajo el año pasado, el 40% de todos ellos son jóvenes.

La Enemdu registra que al terminar 2015 el número de desempleados fue de 357.892 personas. Para 2016 fueron 410.441. Esto indica que 52.549 ciudadanos se sumaron a esta categoría.

A más de las dificultades económicas, el indicador laboral debe ser analizado considerando el comportamiento de la Población Económicamente Activa (PEA).

La tasa de participación global  en el mercado laboral aumentó de 65,8% en diciembre de 2015 a 67,3% en diciembre de 2016.

Al mismo tiempo la PEA subió de 7’498.528 en 2015 a 7’874.021 en 2016. “Significa que más personas están buscando activamente empleo  en el sistema laboral”, precisó Vera.

Adicionalmente la Población en Edad de Trabajar (PET) aumentó aproximadamente en 297.000 personas. “Es decir existió una entrada de personas al sistema laboral, que antes estaban en la inactividad, más allá de la tasa de crecimiento demográfico”, concluye el estudio.

El crecimiento de la PEA también influye en el volumen de subempleo, que se ubicó en 19,9% frente al 14% de diciembre de 2015.

En ese sentido, el titular del INEC explicó que este tipo de empleo se da porque personas que antes pertenecían a la Población Económicamente Inactiva (PEI) ahora buscan trabajo.

Para el presente año las previsiones del Banco Central del Ecuador (BCE) apuntan a que el Producto Interno Bruto (PIB) registrará una tasa positiva de 1,42%.

Con la recuperación de los indicadores económicos a partir del segundo semestre de 2016 se puede prever que en 2017 “las condiciones de cantidad y calidad de empleo van a mejorar”, señaló Diego Martínez.

Niveles de pobreza no se alteraron

El otro objetivo cumplido en medio de un año turbulento en términos económicos, descrito por los funcionarios, fue evitar el crecimiento de los índices de pobreza.

De acuerdo con la Enemdu presentada este martes, entre 2007 y 2016 las políticas gubernamentales lograron reducir la tasa de pobreza por ingresos de 36% a 22,9%. En ese período 1,4 millones de personas salieron de este mal social por ingresos.

En el caso de los índices de  pobreza extrema, alrededor de 900.000 personas salieron de esta condición, pasando de 16,5% en el 2007 a 8,7% en 2016. Además, el coeficiente de GINI, indicador que mide la desigualdad de los ingresos entre la población se ubicó en 0,466 puntos en 2016 frente a 0,551 de 2007. Cuando el indicador se aproxima cada más a 0 quiere decir que se trata de una sociedad más equitativa. (I)

DATOS

De la población total, el 67,3% (7,9 millones de personas) se encuentra económicamente activa. La encuesta del INEC determina que de ese grupo, el 94,8% están empleados.

En diciembre 2016, la tasa de empleo global se ubicó en 95,5% para los hombres y en 93,8% para las mujeres. Es decir, la participación de la mujer en el mercado laboral es 1,7% menor que los hombres.

La tasa de empleo adecuado/pleno se ubica en 47,9% para los hombres y 31,9% para las mujeres. Es decir, el 16,0% de los hombres accede a laborar en mejores condiciones que las mujeres.

Otra de las cifras que revela la investigación del INEC es que de cada 10 plazas de trabajo 9 son generadas por el sector privado (en diversas ramas) y una plaza por el sector público. (I)