El tema de propiedad intelectual continúa siendo uno de los más sensibles para Ecuador y el que le llevaría más tiempo a la hora de negociar un acuerdo con la Unión Europea (UE).

“Si bien hay una gran flexibilidad todo tiene que irse armando, y el armar esos paquetes es lo que cuesta, toma tiempo y merece ser discutido en una nueva ronda”, admitió ayer Roberto Betancourt, jefe negociador ecuatoriano, durante una rueda de prensa en la que se repasó lo alcanzado en la II ronda de negociaciones de la semana pasada.

PREOCUPACIÓN POR LAS REGULACIONES

 El ministro de Comercio Exterior, Francisco Rivadeneira, reveló que existe preocupación entre empresas europeas por las medidas restrictivas a las importaciones tomadas por Ecuador, y que estas han sido transmitidas a la Organización Mundial de Comercio (OMC).
No obstante, consideró que estas dudas pueden solucionarse a través del diálogo, por lo que expresó la voluntad del gobierno de discutirlo tanto en el organismo comercial, como en la sede de la Unión Europea en Bruselas.
 Recordó, sin embargo, que no debería haber mayor impacto en las importaciones que Ecuador hace desde la UE, pues, en su mayoría, se trata de bienes de capital y materias primas necesarias para la producción.
 Dijo también que otro de los motivos de las medidas es salvaguardar la calidad.

De su lado, el ministro de Comercio Exterior, Francisco Rivadeneira, recordó que este es un tema fundamental para el plan de desarrollo del país.

Tres fueron los aspectos tratados: biodiversidad, indicaciones geográficas y patentes.

En el primer caso, Rivadeneira recordó que los bienes derivados de la biodiversidad, así como de los conocimientos ancestrales, deben ser aprovechados comercialmente, pero que también es necesario defenderlos en una negociación de este tipo.

“Creemos -añadió- que su aprovechamiento tiene que ser compartido, pues lo que se busca en un acuerdo con la Unión Europea (UE) es la cooperación y la transferencia de conocimiento”.

“Que las ganancias no se vayan solo a las grandes multinacionales que tienen el capital y el conocimiento para poder procesarlos comercialmente, sino que los pueblos ancestrales compartan ese beneficio”, expresó el funcionario.

Patentes e indicaciones

En el caso de las indicaciones geográficas, Betancourt dijo que todavía se discuten detalles sobre cómo las especificaciones europeas se reconocerán dentro del mercado ecuatoriano, en lo concerniente a productos tradicionales como quesos, embutidos y vinos espumantes, entre otros. Sin embargo, dejó en claro que el acuerdo en tal sentido permitirá reconocer las indicaciones ecuatorianas: el cacao ‘Arriba’ y el sombrero de Montecristi.

Según informó la Secretaría Nacional de Educación, Ciencia y Tecnología (Senescyt)-poco después de la I ronda de negociaciones de enero en Bruselas (Bélgica)-, la UE propone el reconocimiento de 117 indicaciones para diversos productos, pero la preocupación gira en torno a que la UE solo se comprometería a reconocer una, porque no otorga protección a las artesanías.

Dos ejemplos de los productos europeos con indicaciones geográficas son el queso parmesano, proveniente de Parma, Italia; y el champagne, de Champagne, Francia.

Rivadeneira comentó que la negociación es asunto de buscar planteamientos y encontrar salidas a temas complejos.

“Como es normal, conforme se va avanzando, se van dejando a un lado temas que son más fáciles y se comienzan a discutir otros mucho más complejos, en los que pueden haber diferencias de intereses entre las partes, y es allí cuando la ronda se vuelve más compleja”, expresó.

De momento, en propiedad intelectual se ha definido con relativa facilidad el tema de patentes de medicamentos. “La Unión Europea no está pidiendo mayor cosa, más allá de lo que ya nos hemos comprometido con la OMC (Organización Mundial de Comercio)”, señaló Rivadeneira, refiriéndose puntualmente a las licencias obligatorias.

Dijo que en este acuerdo (con la OMC), se especifica la necesidad de emitir licencias obligatorias para medicamentos genéricos con la intención de salvaguardar la salud de la ciudadanía, por encima del tema comercial. Aunque dijo que el país no dejará de importar medicamentos desde Europa por su calidad, recordó que ese bloque está a la vanguardia del desarrollo de fármacos que “al menos en el momento no existen en el país”.

Contratación y acceso

En contratación pública -informó Betancourt- hay particularidades que Ecuador quiere ver reflejadas en el documento y en las listas de licitaciones de bienes y servicios que contrata el Estado ecuatoriano, y en los que a la UE le interesa participar.

Mientras, una de las mesas con mayor avance es la de acceso a mercado de bienes industriales y agrícolas. “Los avances han sido tan significativos que hubiéramos podido cerrarlas, pero hay que recordar que este tipo de negociaciones tienen una estrategia preestablecida, lo que hace que no sea necesariamente bueno hacerlo sin intercambios entre mesas hasta el final”.

Ambos funcionarios dejaron claro la intención de llegar a un acuerdo para el segundo semestre del año; sin embargo, se buscan opciones en el caso de que, considerando las elecciones parlamentarias, no se consiga una aprobación antes de enero del 2015 luego del vencimiento del Sistema General de Preferencias (SGP Plus).

“Hemos cabildeado permanentemente para que, en tal caso, se busquen herramientas para no tener que pagar aranceles”, afirmó el ministro Rivadeneira.

La próxima ronda se prevé para mayo en Bruselas y una cuarta a nivel político en Ecuador, en julio.