El salto cualitativo en competitividad para mirar  Ecuador dentro de los tres países de América Latina con mejor tasa de crecimiento económico es resultado de toda la inversión pública, de acuerdo a Verónica Sión, titular del Ministerio de Industrias y Productividad (Mipro).

La promoción de inversiones extranjeras de parte del Gobierno  logró que el país ascienda 16 puestos en el ranking de competitividad del Foro Económico Mundial (FEM) que evalúa a 145 países, destacó Sión.

En el 2012 Ecuador ocupa el puesto 85 a diferencia del año pasado que se ubicó en el puesto 101.

La funcionaria reveló que más de $ 1.500 millones invertidos en bienes de capital y $ 3.300 millones para 880 km de carreteras en buen estado (para evitar que el empresario siga sufriendo cuando a la salida de su planta se le viraban los contenedores) son tareas que se han realizado con la implementación de políticas públicas dirigidas a estimular el desarrollo y la estabilidad.

El reporte del FEM señala que Ecuador en el 2011 ocupaba el puesto 101 entre 142 naciones. Este desarrollo se debe a mejorías en factores de eficiencia (preparación tecnológica, innovación, infraestructura y estabilidad macroeconómica.

En estabilidad macroeconómica, Ecuador ocupa el puesto 37, con un indicador de 5,3 mientras que Suiza, que es el país más competitivo, tiene 5,7 puntos. En estas evaluaciones se analizan factores de orden, requerimientos básicos para el desarrollo, eficiencia e innovación.

Inversión pública

Para Luis Rosero, analista económico, la inversión pública ha dinamizado la economía y vía efecto multiplicador ha incidido en varios sectores económicos, principalmente en la construcción. En efecto, la construcción de obra pública (carreteras) e infraestructura física (hidroeléctricas, puentes, remodelación  de aeropuertos, etc.) ha generado demanda de insumos para este sector, llevando al crecimiento de los proveedores de materias primas.

Recalcó que  la política de vivienda y créditos del  Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess) ha financiando la construcción de vivienda popular y de clase media, con lo cual ha habido mayor incentivo para la construcción.

Otro aspecto importante es que este sector es generador de empleo, sobre todo no calificado, lo que ha permitido aumentar la tasa de empleo o la reducción de la tasa de desempleo. Por otro lado, enfatizó  que  el gasto público, al estar orientado, en gran medida, al gasto social (educación, salud, vivienda) y la política de subsidios a la educación, vivienda y el bono de desarrollo humano, ha permitido la redistribución del ingreso y reducción de la pobreza.

Tecnología e innovación

Una de las labores que destacó la titular del Mipro es la efectuada por el Ministerio de Telecomunicaciones que ha invertido más de 6.600 km de fibra óptica para que 24 provincias del Ecuador estén conectadas. “Esto contribuye al clima de negocios e inversiones”, expresó antes de exponer que esa tarea facilita el acceso de compradores internacionales.

Criterio que comparte la catedrática  de la Escuela de Posgrados en Administración de Empresas de la Espol, Sara Wong, la cual subrayó que las categorías de inversión extranjera directa y transferencia de tecnología tuvieron una mejor calificación para el país, al igual que la suscripción de internet de banda ancha.

Entre los indicadores de innovación, señala Wong, las mejoras que más destacan está la variable de compras del Gobierno de productos de avanzada tecnología, donde el país sube del puesto 83  al  60.

Ecuador también muestra un buen desempeño de la industria nacional, que en el 2010 creció al 6,7%; en el 2011 al 6,9% y para este año se prevé un crecimiento del 6,8%.

En el presente año, durante el primer trimestre, la economía del país logró  un crecimiento del 4,8%, lo cual permite advertir que la gestión gubernamental y la decisiva acción empresarial conducen a niveles de estabilidad y perspectivas ciertas de crecimiento.

Disminución de importaciones

La ministra Sión aseveró que Ecuador camina hacia la diversificación de la producción, con apuestas productivas que implican la reducción estratégica de las importaciones en $ 650 millones y el incremento de las exportaciones en $ 500 millones  hasta el año 2014.

Las exportaciones no petroleras crecieron en los dos últimos años en más de un 20% y las industrializadas en 160%. En el primer trimestre de este año las exportaciones no petroleras totalizaron $ 2.324,5 millones, en tanto que las industrializadas superaron los $ 900 millones.

Para Walter Spurrier, analista económico, es positiva la iniciativa gubernamental de buscar industrializar al país para que las empresas produzcan cosas con un mayor valor agregado. “Si el proceso industrial es únicamente el ensamblar todo lo importado, el valor agregado es muy poco, no vale tanto, lo que vale es justamente que se agreguen productos hechos en el propio país por proveedores locales, para así disminuir las importaciones”, dijo.