El proceso se dispuso mediante el decreto ejecutivo 723 del 24 de abril de 2020. El gobierno busca una empresa unificada que se encargue de toda la operación petrolera y será Petroecuador la que absorba a la estatal Petroamazonas. Néstor Luna, Gerente General de la Unidad Temporal de Fusión, indicó que la decisión marca el inicio de lo que será el proceso de transformación del sector energético del país.

Lo primero fue establecer equipos de trabajo con técnicos de las áreas más sensibles de las dos empresas, las directrices fueron dadas por el Comité Estratégico conformado por varias instituciones, entre ellas: el Ministerio de Energía, la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas y el Ministerio de Finanzas. Según Luna, se trabaja en cronogramas ponderados, pero en general la fusión tiene un avance del 50 por ciento.

Al momento, Petroecuador se encarga del transporte, el refinamiento y la comercialización del crudo; mientras que Petroamazonas de la exploración, explotación y producción. Las dos empresas tienen 10.477 trabajadores, el 80 por ciento corresponde a personal operativo y el 20 por ciento a áreas administrativas.

Será una consultoría la que determine el personal que permanecerá en la nueva empresa, según criterios de experiencia y formación. De ser necesarias las desvinculaciones, se apegarán a la normativa vigente; esto podría suceder en las áreas con redundancia de funciones.

El proceso de fusión, explicó Luna, tiene como objetivo primordial incrementar la rentabilidad. Ecuador produce 480 mil barriles diarios, por debajo de la meta proyectada.

De acuerdo a la planificación, la empresa que resulte del proceso deberá operar desde el 1 de enero de 2021, asumiendo todos los compromisos de las dos empresas fusionadas; esto incluye derechos, obligaciones, patrimonio, competencias, activos y pasivos. A partir de ese momento, Ecuador tendrá una sola firma petrolera estatal como era antes del 2010. Hasta entonces ambas trabajarán de manera normal. (I)