La recuperación mundial, en riesgo por guerra comercial EE.UU.-China
La tensión comercial entre Estados Unidos y China han afectado negativamente a los consumidores, así como a muchos productores en ambos países, señala un estudio coordinado por la economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath.
Los aranceles han reducido el comercio entre EE. UU. y China, pero el déficit comercial bilateral permanece prácticamente sin cambios, según el estudio publicado este jueves 23 de mayo del 2019.
El aumento de los aranceles estadounidenses al 25 por ciento sobre las importaciones anuales chinas de $ 200 mil millones el 10 de mayo, junto con la represalia china anunciada, marca la última escalada en las tensiones comerciales entre ambos países.
El presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó además con aplicar aranceles similares al resto de las importaciones chinas, por valor de 325.000 millones de dólares, si no alcanza un acuerdo comercial con Pekín.
Por su parte, China anunció que impondría a partir del 1 de junio aranceles del 25 % a bienes importados de EE.UU. por valor de 60.000 millones de dólares.
En 2018, Estados Unidos exportó bienes por valor de 120.000 millones de dólares a China, mientras que las importaciones del gigante asiático ascendieron a 540.000 millones de dólares.
El estudio del FMI añade que si bien el impacto en el crecimiento global es relativamente modesto en este momento, la escalada más reciente podría mermar significativamente la confianza de los mercados financieros y empresariales, interrumpir las cadenas de suministro globales y poner en peligro la recuperación proyectada del crecimiento mundial en 2019.
"Los consumidores en los Estados Unidos y China son inequívocamente los perdedores de las tensiones comerciales", recalca la investigación que utiliza datos de precios de la Oficina de Estadísticas Laborales sobre las importaciones procedentes de China, y concluye que los ingresos por aranceles han sido pagados casi en su totalidad por importadores estadounidenses.
El efecto en los productores es más variado, con algunos ganadores y muchos perdedores, dice el estudio. Menciona al desvío comercial como un canal a través del cual los productores se ven afectados. "Se ha producido una desviación del comercio, ya que la disminución de las importaciones procedentes de China parece haber sido compensada por un aumento de las importaciones de otros países".
El otro canal por el cual los productores podrían verse afectados es a través de la segmentación del mercado en el precio de los bienes comercializados, finaliza. (I)