Las nuevas modalidades de contratación que anunció el Gobierno Nacional garantizan la remuneración básica, jornadas de descanso, vacaciones, indemnización en caso de despido intempestivo como se establece en el Código de Trabajo. En el caso de los emprendedores, se suman otros incentivos a los ya establecidos en la Ley de Emprendimientos.

El Acuerdo 222 es el que rige para las contrataciones en el sector de emprendimientos. La idea es ajustar la contratación del personal de acuerdo a la realidad del negocio. “Lo que buscamos con esto es que exista, a más de estabilidad, formalidad. Antes, los emprendimientos tenían una carga impositiva y laboral que no permitía que sigan creciendo en el Ecuador”, señaló Nathaly Pernett, subsecretaria de Políticas y Normas del Ministerio de Trabajo.

En primer lugar, el emprendedor debe estar inscrito en el Registro Nacional de Emprendimiento (RNE) en la página del Ministerio de Producción servicios.produccion.gob.ec, en menos de 10 días recibirá su certificado, el cual debe renovar de forma anual y el tiempo de vigencia será 5 años.

Desde el 31 de julio que se realizó el lanzamiento del RNE, hasta la fecha se han registrado más de 100 emprendimientos. El 80% de las micro y pequeñas empresas no son totalmente formales, muchas tienen RUC, pero no cuentan con todos los permisos de funcionamiento como la patente municipal según el Banco Mundial, 2013. Con respecto a las personas con empleo que se encuentran en el sector informal, según información del INEC de septiembre 2020, corresponde al 48,6%.

En el emprendimiento, los contratos podrán ser renovados hasta la finalización del mismo, un tiempo máximo de 5 años. Según la Subsecretaria de Políticas y Normas del Ministerio de Trabajo, el tiempo suficiente para que un emprendimiento se consolide y se transforme en empresa. “Durante estos 5 años, se tiene la capacidad de cultivar al personal, especializarlo, inclusive de dejar al mejor personal, al más destacado, para quedarme después con el mejor talento humano que conformará la empresa que empieza a consolidarse”, puntualizó Pernett.

Se podrá llegar a acuerdos en las jornadas de trabajo de acuerdo al giro de negocio. “El contrato de emprendimiento me permite pactar horarios sin que haya recargos porque no estoy vulnerando las 40 horas semanales.”

Es el caso de la emprendedora Becky Marcillo, propietaria del restaurante Quimera by Manabí. Su negocio era la venta de comida manabita, que a consecuencia de la pandemia, tuvo que cerrar el local físico y abrir otra opción con la entrega de alimentos a domicilio. Ella contrata a dos personas actualmente, y los horarios son específicos.

“En nuestro emprendimiento tenemos a dos personas trabajando. Una en la cocina y otra encargada de los envíos. Nuestra colaboradora de la cocina trabaja solamente por horas, ya en la tarde no es necesario porque el trabajo ha finalizado. En cambio, quien se encarga de las entregas lo hace en el horario de 12:00 a 14:00.”

Resulta difícil contratar la jornada completa como antes, pero para conservar los empleos de su personal, la propietaria del restaurante adaptó los horarios a la nueva realidad. “No queremos que Quimera desaparezca. Lo que hemos hecho es mantener nuestro servicio a través de la entrega de almuerzos ejecutivos a cualquier punto de la ciudad”.

La sazón única de Manabí y las medidas de seguridad que implementa, han permitido que su negocio siga creciendo. “Tenemos platos típicos de la provincia, manteniendo nuestro sabor e ingredientes originales, esa es la forma de diferenciarnos del resto de restaurantes”, precisó Marcillo.

Entre los beneficios de esta nueva modalidad de contratación contempla el derecho a una liquidación de haberes y la posibilidad de transformarse en contratos indefinidos. “Será un personal que también le interese que el negocio supere la brecha de los 5 años y se convierta en una empresa sostenible”, sostuvo la funcionaria.

En los próximos días se realizarán capacitaciones virtuales sobre los beneficios de esta nueva modalidad de contratos para el sector emprendedor. (I)