La automotriz General Motors suspendió 350 trabajadores hasta noviembre de este año por la caída de ventas, sobre todo, por la menor demanda de Brasil, informó ayer Marcelo Barros, secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines (Smata) de Rosario, Argentina.

La suspensión inicia este lunes y en el lapso de nueve meses los trabajadores recibirán solo el 80% de su salario, mencionó Barros.

“Mientras los empleados estén en carácter de suspendidos seguirán dentro de la empresa, ahora nos esperan nueve meses para dialogar y  que al final del camino no nos encontremos con despidos”, expresó al diario La Capital de Rosario.

Quienes están dentro de este grupo pertenecen a la planta que General Motors tiene en General Alvear, provincia de Santa Fe, en el noroeste de Buenos Aires.

La producción automotriz registró una caída de 10,2% en 2016 en comparación con 2015, según estadísticas de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).

En 2016, Argentina exportó 190.008 autos, una caída de 20,8% respecto de las 240.015 unidades vendidas al exterior en 2015.

Según fuentes sindicales, las suspensiones de General Motors se suman a las que aplicará Volkswagen Argentina este mes por 30 días a 600 empleados de su planta de General Pacheco, en Buenos Aires. (I)