Fondo de estabilización fiscal se crea en la ley económica
Diez años después de que la Asamblea Constituyente de Montecristi eliminara los fondos de ahorro petrolero, en 2008, el actual gobierno plantea la creación de un fondo de estabilización fiscal.
El proyecto de ley para el fomento productivo, presentado el 24 de mayo, propone que “los ingresos provenientes de la explotación de recursos naturales no renovables que superen a lo contemplado en el presupuesto general del Estado (PGE) se destinarán a la generación de un fondo de estabilización fiscal que permita garantizar la sostenibilidad de las cuentas públicas y principalmente de los programas sociales”.
En el presupuesto para 2018, valorado en $ 34.853 millones, se proyectaron ingresos petroleros por $ 1.835 millones por la exportación de 196,49 millones de barriles a un precio promedio estimado de $ 41,92 por barril.
El Ministerio de Hidrocarburos informó en días pasados que entre mayo de 2017 y mayo de 2018 el país obtuvo $ 968,6 millones adicionales por la venta de crudo debido al incremento del precio en el mercado internacional.
Al retomar la figura el Gobierno pretende ahorrar parte de esos excedentes que se generen a futuro para mitigar riesgos en caso de emergencia. En palabras de Richard Martínez, ministro de Finanzas, “amortiguará” shocks externos sin desatender la obra social.
La configuración y administración de dichos recursos aún no han sido explicadas al detalle por las autoridades.
La idea ha sido discutida al interior del gobierno con antelación, dijo Carlos Pérez, ministro de Hidrocarburos. “Tener un fondo que debería guardarse para la época de las vacas flacas”, comentó Pérez esperanzado en que la iniciativa sea aprobada por la Asamblea Nacional.
Aunque actualmente el precio del petróleo se ha mantenido por encima de los $ 60 por barril (en el caso del WTI, crudo de referencia para Ecuador), la creación del fondo de ahorro no será inmediata, pues hay que esperar a que se estabilicen las cuentas fiscales reduciendo el gasto público y el endeudamiento, observó el economista Walter Spurrier.
“Lo primero es establecer metas para atender el problema, es decir, en cuántos puntos del PIB vamos a reducir el déficit este año; debería ser cerca de 2. Debemos tener la economía más o menos estabilizada en tres años”, acotó Spurrier.
A su juicio, el fondo influirá positivamente en el nivel de riesgo país, mejorando las opciones de financiamiento para Ecuador, ya que evidenciaría que el país dispone de recursos para honrar sus obligaciones.
Richard Martínez dijo que expondrá en junio sus estrategias y metas específicas para reducir el gasto del gobierno.
En 2002 apareció el Fondo de Estabilización, Inversión Social y Productiva y Reducción del Endeudamiento Público (Feirep), pero fue reformado en 2005, cuando Rafael Correa era ministro de Economía.
Más tarde fue eliminado en la presidencia de Correa y en su lugar la Asamblea de Montecristi aprobó la Ley Orgánica para la Recuperación del Uso de los Recursos Petroleros del Estado y Racionalización Administrativa de los Procesos de Endeudamiento.
Correa fue un acérrimo opositor de los fondos de ahorro. En su Informe a la Nación del 24 de mayo de 2016 manifestó que el Feirep “limitaba todo gasto público, salvo el servicio de la deuda”, ya que el 70% del dinero estaba orientado a recomprar la deuda pública, mientras que el 10% se destinaba al desarrollo social.
Distintos analistas han cuestionado la eliminación de los fondos que, a sus ojos, habrían reducido el impacto de la crisis económica mundial de 2015 y 2016 a consecuencia de la caída del crudo.
Augusto Tandazo, experto petrolero, apoya que exista un fondo de estabilización, pero considera que es una contradicción del gobierno de Lenín Moreno, quien desde el inicio de su mandato ha manifestado “volver al espíritu de Montecristi”.
“Hay que crear el fondo para estabilizar la economía (...) esa plata debe destinarse para ir bajando el capital de la deuda”, anotó Tandazo y recomendó sincerar el volumen de producción petrolera nacional. (I)