Financieras deben informar con claridad sus servicios
Las instituciones del sistema financiero deberán informar al público en general de las tasas de interés, tarifas y gastos asociados a los diferentes productos y servicios, en forma detallada, incluidos todos los conceptos y modalidades, según la resolución emitida el pasado 8 de mayo por la Junta Bancaria.
La información deberá ser difundida de manera clara, explícita y comprensible por todos los medios de información de la institución a fin de evitar confusión e interpretaciones erróneas.
La norma establece que las instituciones financieras deberán difundir la tasa de interés nominal y efectiva anual, y éstas deben ser expresadas en forma anual para todo tipo de operaciones y en su equivalente para otros períodos.
Adicionalmente, deberán publicar en la página web y en sus oficinas para conocimiento del público el listado de las transacciones básicas que no tendrán costo, las tarifas máximas establecidas para los servicios financieros tarifados con límites máximos y los tarifados diferenciados.
Según la normativa, los titulares de tarjetas de crédito tendrán que recibir toda la información referente a las modalidades de operación de la tarjeta (crédito rotativo o diferido), frecuencia de pago y tasas de interés, dejando constancia por escrito de haberla recibido.
En cuanto a la difusión de tasas de interés, comisiones y gastos de productos y servicios, se lo realizará por escrito, en sus oficinas de atención al cliente y en la página web; y adicionalmente podrá utilizarse para la difusión comunicaciones telefónicas y electrónicas dirigidas al usuario; y de ser el caso, avisos televisivos, radiales y de prensa.
Además, los servicios que presta la institución financiera estarán contenidos en un folleto redactado e ilustrado de forma concreta y fácilmente comprensible. La Superintendencia de Bancos y Seguros remitirá el formato del folleto y el contenido mínimo de lo que debe difundirse.
Janeth Sánchez, ministra de Política Económica, dijo que hasta fin de mes habrá cuatro medidas: regulación del cupo de las tarjetas, educación sobre el endeudamiento, mejoramiento en la información del buró de crédito y promoción del ahorro en los bancos públicos.