Fue decretada como una medida preventiva
Emergencia para cacaoteros incluye entrega de plaguicidas
Como declaratoria “preventiva” catalogó el gerente nacional del Proyecto de Café y Cacao, del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), Javier Villacís, la emergencia decretada para ambos sectores esta semana.
El brote de la plaga monilla a consecuencia de los cambios climáticos relacionados con el fenómeno El Niño ocasionó preocupación en los productores y las autoridades.
Las lluvias continuaron en las principales zonas de cultivo de las provincias de Los Ríos, Guayas y El Oro, y causaron la pérdida de unas 10.000 toneladas de cacao, con una afectación directa a más de 30.000 productores.
“No es una incidencia grave, pero queremos prevenir una debacle”, aseguró.
La emergencia duraría hasta diciembre, aunque “dependerá de la fuerza con que lleguen los cambios climáticos”, indicó la autoridad.
La decisión se conoció el miércoles pasado en un consejo consultivo del sector desarrollado en Guayaquil.
Teófilo Briones, productor de Babahoyo (Los Ríos), señaló que la plaga apareció en marzo y causó que la comercialización disminuyera un 70% aproximadamente.
El vicepresidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao (Anecacao), Juan Pablo Zúñiga, dijo que el decreto de emergencia es una medida oportuna, aunque se “pudo tomar antes”, pues los efectos ya se sienten en las fábricas que desechan granos por la calidad inferior.
Para el experto, lo importante es que no signifique un retroceso para el sector, en un momento que despunte en producción y exportación. En 2014, Ecuador exportó 240.000 toneladas, lo que significó unos $ 700 millones de ingresos para el país, pero sería poco probable cumplir las expectativas de 2015. Y aseguró que las exportaciones no han sido afectadas todavía.
Como parte de esta estrategia, en 15 días el Magap comenzará a entregar kits de plaguicidas y fertilizantes a los agricultores. (I)