Entre marzo y julio se pagaron $ 30 millones por sobretasas en insumos del segmento exportador
El timbre cambiario: ¿Una compensación para los exportadores e importadores?
A mediados de este año, durante una conferencia, el exvicepresidente Alberto Dahik, lanzó una propuesta que, aseguró, aliviaría la carga que trajo al sector exportador la apreciación del dólar y la imposición de salvaguardias al segmento importador.
Dicha fórmula lleva por nombre ‘timbre cambiario’. El mecanismo funcionaría a través de subastas en las que participarán productores para obtener un determinado cupo de importación, pero sin sobretasas.
Durante la subasta, los empresarios deberán ofrecer, cada vez, montos superiores por la misma cantidad de importación, de modo que se llegue a una cantidad en dólares superior a la definida inicialmente.
Esta diferencia monetaria que será el ‘timbre’, explicó Sebastián Cárdenas, experto en Comercio Exterior y profesor de la universidad Espíritu Santo (UEES), sería recaudada, pero no con un objetivo fiscal, sino para transferirla al sector exportador. “Es una especie de compensación (...) y en cierta manera, analógicamente, es como si tuviera un sistema cambiario flexible”, apuntó el académico.
En este caso, el Banco Central del Ecuador (BCE) sería el ente regulador del proceso. Incluso Dahik propone que sea un mecanismo conjunto entre Banco Central, sectores de la producción y financiero
El principal problema externo de Ecuador es que, por estar dolarizado, no tiene capacidad de devaluar la moneda y volver sus exportaciones más competitivas o baratas como lo han hecho países como Colombia, en un momento en que el dólar está apreciado. El vecino país ha depreciado hasta el 60% de su moneda.
La fortaleza del dólar ya ha traído consecuencias. Según datos de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), las ventas no petroleras al exterior disminuyeron 4%, golpeadas por la coyuntura económica, y muchos exportadores han bajado sus precios.
Según Eduardo Ledesma, presidente de la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (Aebe), la falta de competitividad de la fruta ecuatoriana se traduce en su precio de $ 6,55 la caja, frente a competidores como Costa Rica que puede llegar a menos de $ 4.
Ledesma cree que un timbre cambiario pondría en desventaja a ciertos importadores, pues se daría preferencia a aquellos con mayor liquidez y un mejor acceso a créditos bancarios para poder comprar.
Vista la propuesta desde la perspectiva monetaria, países como Argentina, con el cepo cambiario, y Venezuela, con el Cadivi, han ensayado sus herramientas.
El país austral implementó en noviembre de 2011 el programa conocido como ‘cepo cambiario’, como respuesta al incremento de la salida de capitales. Este implicaba la compra de dólares y otras divisas extranjeras por parte de familias y empresas, pues en aquel momento el tipo de cambio oficial hizo que esta moneda fuera el activo financiero más demandado de Argentina, en vista de que era de libre circulación.
Víctor Hugo Albán, presidente del Colegio de Economistas del Pichincha (CEP), señaló que la economía de estos países frente a la de Ecuador es distinta, más aún en el caso de Venezuela, en donde los dólares son escasos.
En busca de otras soluciones
Más allá de si tendría acogida o no la propuesta del ‘timbre cambiario’, para el titular del CEP deberían analizarse otras salidas en el país, aunque, en general, asegura que las medidas tomadas hasta el momento han sido acertadas.
Para Albán este tipo de propuestas deja ver un escaso conocimiento de la realidad económica ecuatoriana y la calificó de ‘absurdo económico’, pues terminará por afectar a la clase media. “Una cosa son las importaciones que, en efecto, terminan por afectar la balanza comercial, y otra es lo que se debería hacer, que es impulsar las exportaciones”, apuntó.
Según Albán, lo adecuado sería eliminar las salvaguardias para las materias primas, pues así no habría necesidad de acudir a un timbre cambiario, y, por otro lado, mantener de forma selectiva las sobretasas para bienes terminados.
De acuerdo con Fedexpor, entre marzo y julio pasado las importaciones de materias primas del sector exportador de línea blanca, madera, alimentos, plásticos, entre otros, pagaron alrededor de $ 30 millones por sobretasas arancelarias. Ahora esperan un análisis del Comex, y en el tema comercial, el gremio considera urgente expandir mercados para aumentar el nivel de ventas.
El presidente Rafael Correa aseguró que aunque el precio del petróleo suba el siguiente año, los inconvenientes externos permanecerían si se mantiene la apreciación del dólar que sería del 30%.
Por otro lado, el Senae anunció que el Estado recaudó $ 3.298 millones entre enero y octubre de este año, el 9,9% más que en 2014. De esa cifra, más de $ 650 millones provienen de las salvaguardias arancelarias. (I)