El cumplimiento en el pago de incentivos tributarios es fundamental
El sector florícola no se recupera desde 2014
Tras el anuncio del Ejecutivo de incrementar las tasas arancelarias a 375 subpartidas, el sector florícola se muestra preocupado y advirtió afectaciones en los negocios.
A escala mundial, Ecuador es el tercer país exportador de flores.
Aporta $ 802 millones anuales a las arcas fiscales y represantan el 10,4% del Producto Interno Bruto (PIB) agrícola, según datos del Banco Central del Ecuador (BCE). Sin embargo, representantes del sector aseguran que desde 2013 la situación no es alentadora y ven riesgos a sus exportaciones con el plan económico del Gobierno.
Alejandro Martínez, presidente ejecutivo de Expoflores, recordó que en 2014 la industria florícola sufrió uno de sus peores momentos con la apreciación del dólar, la pérdida de competitividad del Ecuador y la caída del mercado ruso, uno de sus mayores compradores.
El cierre de este mercado supuso una sobreoferta del 18% de la flor a escala mundial, debiendo prescindir en Ecuador de cerca de 3.000 trabajadores y reduciendo 600 hectáreas (ha) del espacio de producción.
Desde esa fecha, el valor por unidad por cada flor exportada ha fluctuado con una clara tendencia a la baja, que no ha permitido recuperar los precios, aseguró Martínez.
En 2015 el excedente entre costos y gastos de producción y las ganancias que quedan son casi nulas, en comparación a cifras de 2016, cuando nos empezamos a recuperar.
Luego de casi tres años, el mercado se estabilizó parcialmente. Las flores ecuatorianas llegan a 120 países, siendo Estados Unidos el principal consumidor con el 51% de la producción, seguido por la Unión Europea (UE), cuyo porcentaje oscila entre el 19% y 23%, y Rusia con el 14%.
En lo que va de 2017 el mercado presenta un incremento de 12,9% en las toneladas de venta y el 12,7% en ingresos en comparación con los meses de enero a agosto de 2016.
Sin embargo, para Martínez lo óptimo es llegar a un nivel de crecimiento similar al que se obtuvo con la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas y Erradicación de la Droga (Atpdea) con Estados Unidos, que permitió un considerable desarrollo del sector desde 2002 hasta 2008.
Para Juan José Albuja, floricultor, el incremento de aranceles propuesto por el Ejecutivo es un motivo más del cual preocuparse. “Eso va a subir costos en Ecuador, lo que se verá reflejado en el aumento de precios de insumos, materia prima y mano de obra”.
Por consiguiente, la inquietud de los representantes de esta rama es encontrar el mecanismo que les permita generar utilidades, considerando que un incremento en los precios de comercialización les restaría competitividad.
La floricultura ofrece 105 mil puestos de empleo directos e indirectos, sobre todo en la Sierra. Eliminar plazas de trabajo afectaría fuertemente a la población.
Restar recursos a la investigación y desarrollo de nuevas flores tampoco es una opción para Martínez, quien aseguró que “actualmente, la única característica que nos permite estar entre los tres primeros países exportadores es la calidad y diversidad de nuestros productos”.
A pesar de que en el país no se destina un gran espacio al cultivo de flores (solo 4.960 ha), Ecuador cuenta con más de 600 variedades de flores cultivadas en 685 fincas.
Medidas de apoyo al sector
Ante esta problemática, la alternativa de los empresarios es la reactivación de los incentivos tributarios a los que se comprometió el Estado, luego de suspender la Atpdea, a través de los Certificados de Abonos Tributarios (CATS) y los Drawbacks. Esto para mejorar y sostener la inversión, así como la liquidez del sector.
El presidente de Expoflores indicó que la baja en el precio del barril del petróleo impidió el cumplimiento del pago de los incentivos por parte del Gobierno Central.
Hasta el momento, el Estado adeuda al sector florícola cerca de $ 92 millones por concepto de pago de CATS desde mediados de 2016 y Drawbacks a mediados de 2015 hasta la actualidad.
Por su parte Diego Martínez, delegado del Presidente de la República ante la Junta Monetaria Financiera, aseguró en una entrevista con EL TELÉGRAFO que la situación económica del país es distinta y que contarán con los recursos para estos compromisos.
“El nuevo programa económico contempla la generación suficiente de ingresos para atender estos incentivos, se procurará no tener retrasos y honrar los compromisos que estamos adquiriendo para los próximos 4 años”. (I)