El comercio electrónico se consolida en el mercado nacional
El e-commerce es un término que cada vez toma cuerpo en el sector comercial, no obstante, empresas y consumidores ya aplican este mecanismo para sus transacciones.
El término no es otra cosa que el comercio electrónico, un sistema de compraventa de bienes, productos o servicios a través del internet; es decir, a través de este método se comercia de forma online (en línea).
El Ecuador, el comercio electrónico alcanzó un volumen de negocio en 2020 de $ 2.300 millones; un crecimiento de $ 700 millones (43,75 %) con respecto a 2019; esto según informe de la Cámara Ecuatoriana de Comercio Electrónico.
De allí que el sector empresarial y comercial, específicamente considera la necesidad de migrar a un ecosistema digital de negocios. por ello Pablo Andrés Jiménez, CEO de BoxBeep, manifiesta que la pandemia generó un crecimiento acelerado del ambiente virtual para los negocios.
"En el año 2020 todos los negocios digitales crecieron exponencialmente debido a la pandemia, pues por el confinamiento los usuarios dejaron de asistir a centros comerciales y prácticamente todo el comercio en general debió adaptarse a nuevos sistemas de negociación de sus productos", asegura.
Por ello, agrega, los hábitos de consumo se trasladaron a los medios digitales, así las empresas que tuvieron la oportunidad de tener una estrategia digital definida o pudieron implementarla en su momento, sobrevivieron a la pandemia, debido a las ventas online.
La ventaja, a su criterio, es que la tendencia en el mercado apunta al consumo digital, existe un gran público que prefiere las compras online y sobre todo los actores del comercio digital se unieron para cobrar a través de tarjetas de crédito o transferencia bancarias.
A ello se suma el factor seguridad. Recalca que las plataformas lo que hacen es encriptar los datos, o sea blindarlos, en el caso de las tarjetas de créditos se encriptan los números de las tarjetas con el fin de que los hackers no puedan acceder a los números.
David González Natal, director Senior del Área Engagement de LLYC, manifiesta que radiografiar al consumidor nacido de la pandemia ha sido un reto, "porque nunca habíamos experimentado un cambio tan rápido de tendencias fruto de la adaptación al nuevo entorno. Es una oportunidad para todos, pero las marcas necesitarán entender bien al ciudadano y ponerse, más que nunca, en su piel y contexto si quieren tener éxito en sus propuestas”.
Carlos Llanos, director General de LLYC Ecuador, añade que el momento actual exige modificar -en algunos aspectos, de manera drástica-, la manera cómo las marcas se vinculan con los consumidores, retomando formas elementales, muchas de ellas relacionadas con la confianza".
En esta ecuación, llanos y González coinciden en que el consumidor es cada vez más exigente con la disponibilidad inmediata de su compra. Por eso el e commerce es la nueva piedra angular gracias a las garantías de seguridad que ofrece, y convierte la distribución y la última milla en palancas estratégicas. (I)
