El campo se divide en pequeñas fincas
El programa Sistema Nacional de Información y Gestión de Tierras Rurales e Infraestructura Tecnológica (Sigtierras), del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), contará con un presupuesto de $ 300 millones para el mapeo de las tierras rurales, anunció Johnny Hidalgo, director del plan. Para la primera fase, que se desarrolla desde junio del año anterior hasta el 2015, se tienen asignados $ 128 millones.
Al momento el programa cuenta con 170 solicitudes de los municipios, para identificar el número de predios rurales que poseen y en qué condiciones legales se encuentran.
“Hemos logrado concretar los convenios con 66 alcaldías y podremos atender a 50 cabildos en este momento, en base al monto del crédito al que hemos accedido”, manifestó el titular de Sigtierras.
Esta iniciativa gubernamental, que está en ejecución desde el 2009, busca establecer un sistema de administración de la tierra rural a nivel nacional, que garantice su tenencia y proporcione información básica para la planificación del desarrollo y ordenamiento territorial.
Hasta el momento ya se ha realizado el 90% del barrido fotográfico aéreo con el apoyo de nueve aviones, contratos a empresas privadas, luego de haber divido en tres zonas al país.
Hidalgo explicó que luego de obtener la fotografía e identificar los predios, se visita a los propietarios para conocer cuál es la situación legal de su tierra y de ser necesario se los apoya en la legalización de las parcelas o fincas.
En este punto se realiza una categorización, que pueden ser: estatales o privadas. De ser el primer caso, está en manos de la Subsecretaría de Tierras o del Ministerio del Ambiente efectuar la transferencia a los productores; y en caso de ser particulares que están ocupadas de forma informal (herencias que no han culminado el proceso de transferencia de dominio, a compras-ventas, gente que ha migrado y han dejado en manos de terceras personas), el trámite es por la vía legal.
“Este es el mayor porcentaje de la situación actual de la tenencia de tierras que existe en el país”, según el director del programa.
Destacó el interés del Ministerio de avanzar en la legalización de la tierra de los campesinos, entregándole al agricultor gratuitamente el plano de su propiedad, lo cual se convierte en un control de calidad de lo que hace Sigtierras.
El funcionario manifestó que el 95% de los ciudadanos está de acuerdo con la información proporcionada en cuanto a límites, superficie y colindantes.
Además, el programa les entrega a los agricultores asesoría legal gratuita y en cada cantón se procura rubricar convenios con los Registros de la Propiedad y las Notarías para que los trámites tengan tarifas preferenciales.
Mientras a los municipios con los que se mantiene acuerdos se les entrega la siguiente información: ortofotos, modelos digitales de terreno, cartografía temática (uso de la tierra, clasificación, mapas dependientes, zonas de riesgo, accesibilidad a servicios urbanos), infraestructura tecnológica, levantamiento catastral y capacitación. En cambio Sigtierras los apoya por un año en la sostenibilidad del proyecto.
De la información levantada, -de acuerdo a Hidalgo-, las tierras rurales están subdivididas y no pasan de las 6 hectáreas. “Son contadas las propiedades que pasan de 500 hectáreas”, subrayó.