Autoridades, académicos y empresarios conformaron ayer las mesas de trabajo con las que cambiarán el año base para cálculos de las ramas económicas, a cargo del Banco Central del Ecuador (BCE).

Cambiar el año base implica actualizar los indicadores de las diferentes actividades que aportan al Producto Interno Bruto (PIB) del país.

Supone la implementación de nuevas metodologías de cálculo de las Cuentas Nacionales, las cuales registran el rendimiento de los agentes económicos y permite hacer  proyecciones a corto, mediano y largo plazo sobre las que se toman decisiones.

Actualmente el año base que utiliza el Banco Central es 2007; los organismos internacionales recomiendan hacer una renovación por lo menos cada diez años.

Verónica Artola, gerente general del BCE, señaló que la modificación atiende la necesidad de reflejar cuál es la estructura productiva de Ecuador, qué sectores están aportando más, qué ocurre con los precios de los productos, entre otros aspectos.
Tomará alrededor de tres años finalizar el trabajo a través de encuestas, investigaciones y más.

Está previsto que en este año arriben al país delegaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y del Fondo Monetario Internacional (FMI) para brindar asistencia técnica.

En el proceso participarán gremios empresariales, financieros, entre otros. Richard Martínez, presidente de la Cámara de Industrias y Producción (CIP) sugirió incorporar el uso de las nuevas tecnologías, por ejemplo, el Big Data, como herramientas para el desarrollo productivo.

Por su parte, Santiago García, vicerrector del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), destacó que el procedimiento no sea realizado a puerta cerrada en el BCE, sino que considera la opinión de los actores de la economía.

Finalmente, el analista Mauricio Pozo comentó que esto permitirá transparentar las cifras del Central. Además es la oportunidad para debatir el rol que cumple la institución en una economía dolarizada y recomendó devolverle su autonomía. (I)