“El 80% de familias ya ha cobrado el BDH variable”

El Gobierno tiene la meta de reducir la pobreza extrema de 8,6% a 3,2% hasta 2021, y para llegar a este objetivo se implementan varias estrategias y programas.

Uno de ellos es el Bono de Desarrollo Humano (BDH), al cual se le incluyó un componente variable que aumenta los recursos de las familias de $ 50 hasta un tope de $ 150, dependiendo del número de hijos menores de 18 años.

El viceministro de Inclusión Económica y Social, Marco Casco, explicó sobre los alcances de este beneficio.

¿Cuál es la importancia de que se haya incluido este componente variable de acuerdo al número de hijos menores de 18 años al Bono de Desarrollo Humano?
Esta es una metodología implementada en otros países, como Brasil, Chile y Perú, y su objetivo es potenciar las capacidades en la familia, usuaria del BDH, fomentando el principio de corresponsabilidad, a través de un mecanismo de acompañamiento familiar, para garantizar que los niños y adolescentes ejerzan su derecho a educación, salud y alimentación.

¿Cómo desmitificar la creencia de que el Bono de Desarrollo Humano no sirve para lo que está enfocado?
Hay que partir del concepto de a quiénes damos el bono. Lo entregamos a familias o adultos mayores con ingresos per cápita de menos de $ 47 al mes. Estas familias con eso viven y ese es el enfoque. Nuestros registros indican que entre el 80% y 90% de la población beneficiaria lo usa en alimentación y salud.

De enero a abril se estimaba entregar a 74 mil familias el Bono de Desarrollo Humano variable. ¿Cuántas familias ya reciben este beneficio?
Desde el 2 de enero pagamos a 50 mil familias. Se controla diariamente a quienes cobran. Con fecha hasta 22 de enero ya hay el 80% de núcleos familiares que han cobrado el bono.

En febrero se entregarán 8 mil más y otros 8 mil en marzo, hasta llegar a abril con 74 mil. Esto significa que en enero pagamos $3’800.000, en febrero $ 4’440.000 en marzo $ 5’000.000 y a partir de abril $ 5’600.000.

Se anunció que se necesitan $ 85 millones para cubrir el pago de este bono variable. ¿Ha existido alguna modificación en ese monto?
No ha habido modificación. Esa inversión la contabilizamos de acuerdo a la distribución. Para el bono variable tenemos $ 63 millones y el resto es para la pensión de adultos mayores a quienes les duplicamos el bono de $ 50 a $ 100. Como se trata de un desembolso mensual, nos toca evaluar cada mes cómo va el flujo de caja.

¿Cómo se trabaja para posible ingreso de nuevos beneficiarios?
Esta es una tarea de la Senplades, el plan Toda una Vida y el Consejo Sectorial, pero se estableció una ficha en noviembre, que será común a todas las instituciones que prestan servicios a las familias para tener un solo criterio de evaluación y así empezar a levantar el registro social. Es decir, habrá una nueva evaluación desde marzo.

En Santo Domingo de los Tsáchilas, Manabí y Esmeraldas, afectadas por el terremoto, se hará un barrido total, mientras que en las otras provincias se actualizará el registro.

Como parte del bono está el crédito de desarrollo humano, ¿de qué se trata esta iniciativa?
Es el adelanto del bono a las familias para que realicen emprendimientos. Esto es para incluir actividades económicas dentro de los núcleos para que obtengan recursos económicos.

La idea es que los emprendimientos sean sostenibles y para eso capacitamos en la formulación de proyectos y acompañamos en la ejecución. Esto permitió que en 2017 entregáramos unos 90 mil créditos. (I)