Aproximadamente un 35% de los agricultores en Ecuador utiliza semilla certificada de diferentes rubros (tipos de alimentos), mientras que el resto de productores recicla las semillas o usan aquellas que no tienen las características adecuadas.

Así lo manifestó Javier Jiménez, director nacional de transferencia de tecnología del Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias (Iniap).

El funcionario explicó que existe una limitación de semillas certificadas y que, a veces, al no haber la cantidad suficiente de este producto en el mercado, el agricultor opta por reutilizar las semillas.

En este contexto, resaltó el trabajo que realiza la entidad en cuanto a la creación de semillas mejoradas.

“En el caso del arroz, tenemos una mejor penetración de uso de semillas del Iniap. El 80% es semilla de papa y el 80% del fréjol que se cultiva en el país también es parte de su inventario”, precisó.

La semilla certificada es una categoría de semilla de calidad, que puede ser nacional o importada.

El Iniap ha logrado liberar 19 variedades de papa, lo que repercute en el mejoramiento de papas nativas, por lo cual se conservaron alrededor de 300 variedades. En cereales se han liberado 12 variedades de arroz, 12 de cebada, 6 de avena y 18 de trigo. Además, han recuperado granos andinos y mejorado genéticamente dos variedades de chochos, cinco de quinua, una de amaranto, seis variedades de alverja y 29 de fréjol arbustivo.

El Iniap ha liberado 19 variedades de papa y mejorado la calidad de las nativas

Al momento el Iniap ha realizado transferencias de tecnologías en 16 provincias del país y cuenta con 47 técnicos que se dedican a esta actividad. Además, desde 2012 han capacitado a alrededor de 12.000 productores a nivel nacional.

Las provincias en donde trabaja esta entidad son: Azuay, Cañar, Loja, Zamora Chinchipe, Morona Santiago, Francisco de Orellana, Pastaza, Napo, Carchi, Imbabura, Pichincha, Cotopaxi, entre otras.

Remigio Pingos, agricultor de la parroquia San Juan-Chimborazo, recibe semilla mejorada de papa de la entidad. Él indicó que con este material, la producción del tubérculo es mucho mejor que antes.

“Hace más de 6 años, de un quintal de semilla normal nativa de papa gabriela, cosechábamos máximo ocho quintales, pero ahora con un quintal de semilla de papa mejorada del Iniap, tenemos cada siete meses una producción de 15 a 18 quintales, dependiendo de la temporada”, manifestó Pingos.

Otra productora que usa semillas mejoradas es Isabel Pila, oriunda de la comunidad de Tandacato, en Pastocalle, provincia de Cotopaxi.

Ella utiliza las semillas de trigo, papa, chocho y maíz. “Por medio de las capacitaciones nos enseñan a cultivar con abonos orgánicos, lo cual es beneficioso porque nos ayuda a mantener la economía en nuestros hogares”, indicó.

Leonidas Taxiguano, productor de maíz en el cantón Rumiñahui, provincia de Pichincha, manifestó que desde hace dos años utiliza estas semillas mejoradas. “Es un material resistente a las lluvias, a las plagas y a otros problemas que podamos tener”, resaltó.

Importación de semillas

Jiménez indicó que el país tiene una fuerte importación de semillas de híbridos de maíz duro, y de hortalizas certificadas.

Sobre este último rubro, dijo que el 100% de las semillas de lechuga, tomate, brócoli que hay en el país es importado.

“Se importan alrededor de 30 millones de dólares anuales en semillas certificadas de diferentes hortalizas”, puntualizó.

Indicó que es difícil la producción de semillas nacionales de hortalizas, por las condiciones que necesitan para su producción, ya que provienen de países que tienen las cuatro estaciones, que cuentan con un período de frío fuerte y una condición de humedad adecuada.