Entrevista / Juan Antonio Franco / director de mercadeo de La Fabril
Deoleo invierte en Ecuador porque es “un país estable”
La empresas Deoleo, de España, y La Fabril, de Ecuador, firmaron a inicios del mes un convenio de alianza estratégica para la producción de aceites y grasas vegetales en el país.
Esta unión permitirá la elaboración de nuevos productos de calidad y a menor costo para que sean comercializados en Ecuador y exportados en América Latina.
Juan Franco, director de mercadeo de la empresa ecuatoriana La Fabril, da detalles del convenio y del beneficio que ha tenido la compañía con la aplicación de salvaguardias a varios productos importados.
La marca española Carbonell, perteneciente a la empresa Deoleo, fue fundada en 1866 y es reconocida mundialmente por la calidad de su aceite de oliva, con presencia en más de 60 países.
Con el 12% del mercado global, lidera este segmento y, por primera vez en décadas, otra industria fuera de España envasará sus productos.
¿En qué consiste el convenio que suscribieron con la empresa española Deoleo?
Deoleo es la compañía más grande del mundo en aceite de oliva. Que no solo tiene marcas de aceite de oliva, sino que también cosecha el producto.
La Fabril es la empresa más grande de Ecuador en aceites, con muchas marcas. Nos faltaba ese complemento del mejor aceite de oliva y ahí empezamos a hablar con los amigos de Deoleo. Vimos una gran oportunidad y estamos listos para el reto.
¿Qué cantidad de aceite de oliva se consume en el país?
Tenemos 2 objetivos de largo plazo, el primero es incrementar en Ecuador el consumo de aceite de oliva por persona, el cual está en estos momentos en alrededor de 230 mililitros y no hay ningún problema en llevar eso a 3 años a 700 u 800 mililitros. Lo cual igual es un estándar bajo con el promedio de otros países.
Lo segundo, y es algo que La Fabril quiere y fomenta en otros productos, es el tema relacionado con la salud.
El aceite de oliva está comprobado científicamente que mejora varios índices de nuestra salud. Ayuda a la reducción del colesterol, mejora el nivel de azúcar en sangre, combate la hipertensión y favorece la absorción de calcio en el organismo.
La Fabril envasará y comercializará productos de Deoleo bajo la marca Carbonell a más de 50 mil puntos de venta directa.
¿Al producirse en el país va a tener un menor costo?
Lo primero es hablar de la calidad del producto, de variedad virgen y extravirgen. Lo que nosotros estamos haciendo es traer este aceite de países del Mediterraneo, siempre recordando que Ecuador no es un país que geográficamente está adecuado para la siembra del árbol del oliva.
Es un insumo que hay que importarlo, nosotros lo traemos en buques y lo almacenamos en bodegas especializadas que están ubicadas en Manta. En nuestro centro de manufactura lo envasamos, colocamos en botellas, etiquetamos y lo vendemos.
En términos de precio, pensamos que versus el que está en el mercado estará entre el 10% y 15% del costo normal.
¿Se exportará el producto?
Queremos aprovechar todas las oportunidades que la matriz productiva nos ofrece. En relación a las posibilidades y a la alineación con el Estado, vamos a exportar el producto. No hay todavía nada concreto a cuáles países, pero serán de toda la región.
¿Pór qué Deoleo eligió Ecuador?
Es un país estable, principalmente. Somos complementarios, ellos son líderes mundiales en aceites de oliva y nosotros somos líderes en Ecuador en la producción de envasado y comercialización de aceites. Eso nos motivó a unirnos.
Esta es la primera operación que permite la empresa Deoleo fuera de España. Somos el primer lugar fuera del país ibérico donde hay un envasado de aceite de oliva de Carbonell.
¿La aplicación de salvaguardias a varios productos importados favoreció a La Fabril?
Nosotros siempre hemos estado preparados para el entorno. Las salvaguardias, el cambio de la matriz productiva, son oportunidades para hacer mejor las cosas y de aprovecharlas.
En varias de nuestras categorías y marcas de productos, como por ejemplo de margarinas, detergentes, cremas dentales, entre otras, lo que hemos visto de estas políticas del Gobierno es que nos permiten aprovechar con nuestra creatividad e innovación la situación del mercado.
Definitivamente somos del lado que vemos estas situaciones como oportunidades y no como problemas o de quejarnos. Eso también tiene que ver con la cultura y la actitud de la empresa, que innova cada día. (I)