Compañías proponen renovación del parque automotor del país e incentivos tributarios

Ensambladores e importadores de vehículos y motos, autopartistas y comerciantes de todo el país acordaron que el sector requiere cinco ejes de acción para dinamizar su actividad económica.  

En primer lugar proponen desarrollar una política de Estado con participación público-privada que establezca reglas claras para fomentar inversiones, transferencia de tecnología y generación de empleo.

Daniel Espinosa, vicepresidente de la Asociación de Empresas Automotrices de Ecuador (Aeade), quien presentó las propuestas ayer, dijo que una política a largo plazo para la estabilidad de la industria es indispensable. “En los últimos 10 años hemos tenido 105 cambios en reglamentación técnica, tributaria y comercial. En un promedio de 10 veces al año el sector automotriz ha tenido que cambiar de rumbo para adaptarse a las políticas”.

Otra de las propuestas del sector es el denominado Plan Renova 2.0. Esta iniciativa busca cambiar alrededor de 500 vehículos comerciales (camiones, buses y furgonetas escolares) cada año. Lo que motiva esta iniciativa es mejorar la seguridad vial y la calidad ambiental del país.

Según Espinosa, actualmente, el 50% de los vehículos comerciales ha cumplido más de 11 años de vida útil; y el 25% tiene más de 26 años. Por parte de los autos privados, el 35% también ha superado los 11 años de tiempo útil.   

Para implementar este plan, listo para iniciar durante el último trimestre de este año, las empresas solicitan alianzas público-privadas que les permitirían acceder a líneas de crédito con organismos internacionales, por ejemplo, y así fortalecer la propuesta.  

En tercer lugar, los representantes de la industria automotriz piden impulsar políticas para facilitar el acceso a los ciudadanos a las nuevas tecnologías de movilidad que contribuyan al cuidado del medio ambiente y reduzcan el consumo de combustible. Este planteamiento incluye mejorar la oferta de combustibles de mayor calidad sin subsidio. “Esta idea nos permitiría adquirir, tanto a comerciales como a particulares, combustibles de mejor calidad y con otros incentivos tributarios”, explicó Espinosa.

Además, solicitan la generación de líneas de crédito preferenciales para la renovación de tecnologías eficientes para el sector productivo, así como acuerdos comerciales.

Finalmente, apoyan la revisión de las normas tributarias solicitadas por otros sectores empresariales, en cuanto al anticipo al Impuesto a la Renta y la eliminación del Impuesto a la Salida de Divisas.

En lo que va de 2017, el sector presenta una reactivación. Gloria Navas, miembro de la Aeade, dijo que gracias a la competitividad actual, los precios de los autos se han reducido en 3%. A finales de este año esperan alcanzar ventas de cerca de 85.000 unidades, frente a las 63.500 vendidas en 2016.

El sector emplea a 56.000 personas directamente. La contribución tributaria anual entre 2012 y 2014 fue de $ 1.600 millones; en 2015 disminuyó a $ 1.100 millones; y en 2016 fue de $ 895 millones. (I)

PROPUESTAS

Generar una normativa que defina la vida útil de vehículos comerciales y particulares e incentivar la renovación del parque automotor  a través del Plan Renova 2.0.

Reestructurar el cálculo del anticipo al Impuesto a la Renta y eliminar el impuesto mínimo. El sector solicita revisar el Impuesto a la Salida de Divisas y la simplificación del Impuesto a Consumos Especiales.

Implementar una política industrial con incentivos para el incremento del componente nacional, desarrollo de proveedores y transferencia tecnológica e internacionalización.

Fomentar el acceso a nuevas tecnologías mediante acuerdos comerciales y normativa específica para  que el sector promueva el cuidado del medio ambiente.

Generar normativa para la industria de motocicletas que diferencie el trato entre ensambladores e importadores. Además, crear líneas de crédito preferenciales. (I)