El fortalecimiento de las relaciones comerciales y la atracción de inversiones son dos de los principales ejes que han guiado la ruta del Ministerio de Comercio Exterior, durante el actual período presidencial.

El mandatario Lenín Moreno decidió encargar el timón de ese proyecto a Pablo Campana, un joven empresario de amplia trayectoria en el sector privado, que ha conseguido varios de los objetivos propuestos.

La gestión de Campana le hizo ganarse la confianza del Jefe de Estado, quien le encargó el Ministerio de Industrias y Productividad, además de la cartera de Acuacultura y Pesca. (I)

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El país pone en su mira a los acuerdos comerciales

Desde el inicio de su mandato, el Gobierno puso sobre la mesa una política de apertura hacia nuevos mercados que le permita al país concretar acuerdos con nuevos socios.

En ese sentido, el ministro Campana ha realizado varias giras internacionales para exponer las ventajas y afianzar relaciones comerciales en Europa, América y Asia, principalmente.

En agosto de 2017 el Gobierno logró la aprobación de acuerdos comerciales con El Salvador y Nicaragua para incrementar las exportaciones.

Con ese enfoque, Ecuador además concretó el 25 de junio de 2018 el Acuerdo de Asociación Económico Inclusivo con los Estados de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés).

Este bloque integrado por Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein y con aproximadamente 14 millones de habitantes, importa de Ecuador banano, oro, cacao, rosas, aceites de pescado, camarones, entre otros.

El proceso para suscribir un acuerdo comercial con la Comunidad Euroasiática se encuentra en marcha y se espera que se concrete en 2019.

Acuerdos de complementación económica y comercial con países como Japón, Emiratos Árabes Unidos, además de China y Reino Unido, también están en la mira de Ecuador. (I)

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La atracción de inversiones es prioridad para el país

Otro de los impulsos de la cartera de Comercio Exterior ha sido el fomento y la atracción de inversión extranjera, que le permita al país contar con recursos frescos para dar un respiro a su caja fiscal.

En ese sentido, el ministro Campana ha realizado giras por China, Corea del Sur, Dubái, Emiratos Árabes, España, Estados Unidos, Japón, México, Noruega, Catar, Reino Unido, Rusia, Suecia, Suiza, entre otros países.

Fruto de estas gestiones, según el ministro Campana, el Gobierno ha firmado 137 contratos de inversión por $ 10.300 millones. De esos acuerdos, 84 compañías ya empezaron sus inversiones.

El horizonte del régimen es alcanzar $ 15.000 millones en cinco años, a razón de $ 3.000 millones por año, desde 2019 y para alcanzar ese objetivo, la Ley de Fomento Productivo será la punta de lanza; sin embargo, el reglamento de la normativa aún no se ha expedido.

De acuerdo al Banco Central del Ecuador (BCE), la inversión extranjera que actualmente recibe el país viene en mayor proporción desde el continente americano ($ 326,3 millones durante el primer semestre de 2018), seguido de Europa ($ 177,6 millones) y Asia ($ 26,3 millones).

La explotación de minas y canteras y los servicios prestados a las empresas, son los que mayores recursos ingresan. (I)

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Ecuador restableció relaciones con los EE.UU.

El principal socio comercial de Ecuador es Estados Unidos y lo demuestran las cifras. Según el Ministerio de Comercio Exterior, entre enero y octubre de 2018, Ecuador exportó hacia ese país norteamericano $5.431,8 millones e importó $ 3.939,5 millones.

El interés del Gobierno es retomar las relaciones comerciales con Estados Unidos, resquebrajadas durante el anterior régimen. Para ello, el ministro Campana ha viajado en varias ocasiones a ese país acompañado de delegaciones empresariales de diferentes sectores.

Uno de los signos positivos del restablecimiento de relaciones fue la renovación, el pasado febrero, del Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) hasta 2020, en el que el rol que jugaron tanto la Cancillería como el Ministerio de Comercio Exterior fue fundamental.

Este instrumento otorga un tratamiento arancelario preferencial a más de 5.000 productos provenientes de casi 150 países, entre ellos Ecuador.

Pero uno de los logros más importantes fue precisamente la reactivación del Consejo de Comercio e Inversiones (TIC, por sus siglas en inglés).

El TIC es el foro principal de diálogo entre Ecuador y Estados Unidos en el que se pasa revista a la relación bilateral de comercio, inversiones y cooperación. (I)

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Ingreso a la Alianza del Pacífico es una meta

Para Ecuador, entrar a la Alianza del Pacífico como Estado asociado y no como observador es un trampolín que le permitirá no solo estrechar relaciones comerciales en la región, sino apuntar a México y Estados Unidos.

En varias oportunidades el ministro de Comercio Exterior ha visitado México, no solo para reunirse con empresarios, sino para realizar personalmente las gestiones que le permitan al país andino ser parte de este grupo que reúne a las cuatro economías más grandes del continente: Chile, Colombia, México y Perú.

Tras la XIII Cumbre de la Alianza del Pacífico realizada en julio en Puerto Vallarta, el bloque decidió aceptar a Ecuador como Estado asociado, abriendo además la oportunidad de convertirse en miembro pleno.

Estos objetivos fueron posibles gracias a las gestiones realizadas por el principal del Ministerio de Comercio Exterior y a los signos de apertura comercial y productiva que Ecuador ha demostrado en su política comercial.

En la toma presidencial del flamante mandatario Manuel López Obrador, el ministro Campana sostuvo encuentros con 39  empresas mexicanas, que habrían visto al país no solo como un socio en materia comercial, sino como un importante destino de inversiones en industrias como la alimenticia y la de hidrocarburos. (I)

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Las ZEDE impulsan una nueva matriz productiva

Otro de los elementos que forman parte de una política pública que busca promover el encadenamiento productivo es el impulso a zonas especiales de desarrollo económico (ZEDE).

El objetivo es dinamizar la industria nacional para que genere competitividad y pueda acceder a nuevos mercados, pero también atraer inversiones gracias a los incentivos arancelarios.

Los inversionistas de las ZEDE tienen diferentes incentivos según el Código Orgánico de la Producción e Inversiones, entre ellos el 5% de reducción del impuesto a la renta, igual porcentaje para las nuevas empresas durante un lustro y a partir del sexto año, cinco puntos menos en sus declaraciones tributarias.

Además, cero aranceles para la importación de insumos y materias primas; y exenciones del ISD para el pago de recursos financiados en el exterior.

En julio se aprobó la creación de la ZEDE de Quito, la cual estará ubicada en Tababela, cerca del aeropuerto de la capital. De acuerdo al Gobierno, este ente ya tiene empresas interesadas en participar, con una inversión de al menos $ 285 millones.

La ZEDE de Quito se unió de esta manera a las del Litoral (Guayaquil), Eloy Alfaro (Manta) Piady (Yaguachi-Guayas) y Yachay (Urcuquí-Imbabura). (I)