$ 5.300 millones para obtener energía renovable
Uno de los objetivos planteados por el Ecuador para impulsar su matriz energética es lograr que hasta el 2016 el 95% de la energía que utiliza el país provenga de fuentes renovables, informó la ministra de Industrias y Productividad, Verónica Sión, en el marco de la Cuarta Reunión de Expertos de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial, que se realiza en Quito.
A la cita acuden hasta el viernes representantes de 20 países latinoamericanos, quienes tratarán temas relacionados con políticas industriales para el crecimiento basado en el manejo eficiente de recursos (energía y desechos), eficiencia en el uso de recursos, producción limpia para la industria; y seguimiento a través de indicadores del crecimiento verde.
Sión resaltó que para cumplir con una política nacional y regional de cuidado ambiental será necesario establecer una normativa que impulse la productividad de la industria, reducir los riesgos ambientales, proteger la biodiversidad y promover la reutilización de residuos.
Como una política de cuidado y desarrollo social, Sión recordó que Ecuador apuesta a una transformación productiva que permita dejar el modelo primario exportador y extractivista y migrar hacia un modelo de desarrollo industrial sostenible.
Los programas que impulsa Ecuador para la conservación ambiental van desde propuestas mundiales hasta locales. A nivel internacional se expuso la iniciativa Yasuní-ITT, mediante la cual el Ecuador propone mantener bajo tierra sus reservas petroleras, resaltó Silvia Peñaherrera, subsecretaria de Industrias.
En materia de reciclaje, uno de los ejemplos es la recolección de envases plásticos. Desde la creación del impuesto redimible a las botellas, de a fines del 2011 a agosto del 2012 se recolectaron 430 millones de unidades plásticas y se devolvieron $8’600.000. En el 2013 se prevé alcanzar el 70% de la recolección de botellas plásticas en el país.
Otro de los incentivos para la producción verde es la deducción del 100% del pago del impuesto a la renta sobre gastos en compra de maquinaria y equipos para producción más limpia y para la implementación de sistemas de energías renovables en las industrias, dijo Peñaherrera.
Otro de los programa busca limitar el uso de aparatos ineficientes, sustituyendo lámparas incandescentes por focos ahorradores. Se invirtió $20 millones, ahorrando al Estado $101 millones anuales por reducción de consumo de diesel en las termoeléctricas y la disminución de CO2 fue de 226.821 toneladas.
Víctor Hinojosa, jefe de ONUDI para América Latina y el Caribe, dijo que al momento se trabaja en el crecimiento de la industria con el objetivo de reducir la pobreza a través de actividades productivas: “la efectividad de políticas ambientales no solo se mide en los descensos de indicadores de la contaminación industrial, sino también se demuestra a través de la calidad de vida que tienen los habitantes”.