$ 1.000 millones para proyectos multipropósitos
En compañía de varios secretarios de Estado, el vicepresidente de la República, Jorge Glas, el pasado viernes, sobrevoló la zona donde se edifica el proyecto Multipropósito Chone, que tiene entre sus objetivos mitigar los riesgos de inundaciones y asegurar el abastecimiento de agua en el sector.
Durante su visita destacó los avances en los trabajos ejecutados por el consorcio Equitesa-Equitransa, entidades ecuatorianas que se encargan de la construcción desde junio de este año, luego de que el Estado ecuatoriano terminara unilateralmente el contrato con la empresa china Tiesijú.
Aseguró que como parte de esta medida se ejecutaron garantías por más de 9’000.000 de dólares.
Asimismo, resaltó la importante función que tendrá la obra en beneficio de más de 125.000 habitantes de la provincia y lamentó los inconvenientes suscitados durante su ejecución.
“No olvidemos que algunos hasta llevaron al Estado ecuatoriano a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, por la decisión política de construir un proyecto tan esperado por los manabitas”, expresó.
El Segundo Mandatario manifestó que los planes de propósito múltiple en el país son históricos. Dijo que en su conjunto representan más de 1.000 millones de dólares. “Se realizan 10 estudios adicionales de factibilidad e ingeniería para nuevos proyectos, a partir del próximo año”, comentó.
También afirmó que el presidente de la República, Rafael Correa, dispuso que se complementen los análisis de la obra realizada en Chone, para programas de riego y la potabilización de agua cruda por parte del Municipio.
Características del proyecto
Los trabajos realizados por las contratistas nacionales en la zona han avanzado un 7,47% y tienen una inversión superior a los 45 millones de dólares. La primera fase contempla la construcción del canal del encauzamiento de San Antonio y la represa de Río Grande.
El primero tiene la doble finalidad de separar el río Chone del de Garrapata y permitir la descarga de ambos afluentes. Mientras que el segundo está destinado a regular las aportaciones del Río Grande, con el objetivo de disminuir los peligros de inundaciones en la ciudad, asegurar el abastecimiento del líquido vital en la zona hasta 2035 y satisfacer la demanda de un área de riego de 2.250 hectáreas.
Walter Solís, ministro del Agua, explicó que al concluirse el contrato con la institución asiática la construcción de la obra se aceleró notablemente.
“Teníamos previsto en el invierno terminar la primera etapa de la cimentación, pero veo que ya estamos avanzando en la segunda”, comentó el funcionario.
Aseguró que actualmente acopian materiales en varios sectores para no parar la obra en los meses de lluvias, cuya culminación se prevé para octubre de 2014. La obra es fiscalizada por la Escuela Superior Politécnica del Ejército (ESPE).
El titular de esta cartera de Estado aseveró que en el proyecto, desde que inició su ejecución en 2010, la inversión asciende a 120 millones de dólares.
Wilson Mendoza, subsecretario de la Demarcación Hidrográfica de Manabí, manifestó que en un informe de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) se registra un promedio de 10 inundaciones por cada invierno, a nivel provincial.
“No solo estamos preocupados de la obra física, como sucedió en gobiernos anteriores, en los que hacían los trabajos de cemento y dejaban a las personas sin ninguna compensación”, comentó Mendoza.