En Santa Elena los productores se preparan para sembrar el sorgo. Un cultivo rústico que se adapta a las condiciones climáticas de esta provincia costera. El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) impulsa su producción, por ser un cereal de ciclo corto que sirve para la fabricación de balanceado para animales. Resiste a las sequías y al calor, lo que lo hace un cultivo fuerte. Las raíces del sorgo permiten el aprovechamiento total del agua y ayudan a que el suelo se prepare para el próximo cultivo. Ricardo Vinueza, director distrital del MAG en Santa Elena, dijo que el cultivo tiene características que pueden ser una alternativa en la siembra de maíz. “El sorgo tiene bajos costos de producción, además es resistente a las enfermedades y plagas de la zona”. Para impulsar su producción el MAG da a conocer las bondades del producto con empresas privadas que venden las semillas. En Santa Elena se iniciará con la siembra de sorgo en el Valle de Javita, de la parroquia Colonche. Este lugar tiene un potencial de 4.000 hectáreas donde no se ha sembrado y hoy tiene riego gracias a la Empresa Pública de Agua. Con el apoyo del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap), la Universidad Estatal Península de Santa Elena (UPSE) y la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), se trabaja en forma conjunta en la implementación de riego parcelario, “parte complementaria del proyecto”. En la socialización del programa se va a sembrar una hectárea, en la cual no solo se cultivará sorgo, sino también productos con enfoque de un mercado determinado y que se adapte a las condiciones de la zona. Por otra parte, entre otras gestiones, el Gobierno Nacional analiza incentivos y líneas de créditos para que la gente se motive a incursionar en este cultivo. La producción de sorgo comenzó en Santa Elena hace dos años Gregory Hutto, gerente de Montelia S.A., es productor de sorgo, su hacienda está ubicada cerca de Zapotal. Hace dos años trajo la semilla desde Argentina y sembró 60 hectáreas; su resultado fue muy productivo. Hutto explicó que es fácil de mantener. “No requiere mucha agua y con una siembra se sacan dos cosechas. Se corta, revive y luego sale otra”. Para la recolección de la semilla se utiliza una cogedora, como la de arroz. Hutto posee una planta de secado y limpieza. El producto lo entrega a industrias procesadoras de alimentos balanceados para aves, cerdos y camarones. “Lo que tratamos de hacer es crear un programa de rotaciones, debido a que los productores tienen la costumbre de sembrar el mismo producto todo el año”. Como consecuencia, las enfermedades y las plagas se hacen más fuertes y se incurre en un gasto mayor en insumos; además, la producción es menor. Para evitarlo es necesario encontrar una balanza entre cultivos y rotarlos con otros productos, lo que permite que descanse el suelo, añadió Hutto. Comercialización del sorgo en Ecuador Vinueza explica que este cultivo tiene demanda y cuenta con un mercado para comercializar. Con este fin, en Santa Elena se estableció una mesa de trabajo con la industria que compra maíz, la cual manifestó su interés en la adquisición de la semilla de sorgo. El nivel de sus componentes nutricionales y los costos de producción también son atractivos para la industria que busca diversificar la fuente. “No solo maíz, sino también sorgo”. El precio del quintal de sorgo es de $ 12. El MAG trabaja en la zona a sembrar, para enlazarla directamente con la industria en el tiempo de cosecha. (I)