El acuerdo ministerial 17131, suscrito por el Ministerio de Industrias en 2017, determina que los autos ensamblados en el país contengan mínimo 19% de partes fabricadas en Ecuador hasta 2020. Esto motivó a las empresas fabricantes de piezas automotrices a invertir en sus plantas para cubrir la demanda que tendrían las ensambladoras. No obstante, ante el escenario de pérdida de la industria local, los empresarios están en incertidumbre. El arancel de 15% para el CKD (partes importadas) de los vehículos de origen ecuatoriano se mantiene vigente y no se ha dado paso a una reducción paulatina de los tributos en función de la cantidad de partes de producción local que integra un vehículo. Esta estrategia de fomento productivo fue aprobada en 2012, pero no se implementó, aseguró Luis Carlos García, gerente de Imfrisa. El representante de esta empresa que fabrica rodamientos y retenedores señaló que tanto el desarrollo como las inversiones en el sector fabricante de autopartes se han estancado debido a la falta de políticas públicas y aseguró que existe preocupación en la industria. El empresario señaló que al haber menor ensamblaje también se afecta la demanda local de ciertas partes y piezas. Mientras que Juan Carlos Calle, de Faesa, fabricante de acondicionadores de aire para autos, señaló que la industria apoya la apertura comercial de Ecuador, pero requiere incentivos para que la competencia sea igualitaria. De acuerdo con cifras de Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade), en el país hay 92 empresas autopartistas que fabrican ejes, cardanes, chasis, baldes de camioneta, amortiguadores, las cuales invirtieron en 2018 unos $ 23 millones. Las firmas vinculadas con este sector son metalmecánica, caucho, vidrios, pintura, electrónica, plásticos y textiles, las cuales generan alrededor de 5.000 plazas de empleo, sin embargo la crisis por la que atraviesa la industria nacional pone en riego esa estabilidad laboral. De no darse los correctivos por parte del Estado, los ensambladores sostuvieron que podrían irse a países como Colombia y desde allá exportar a Ecuador con 0% de aranceles. “Cada puesto de trabajo directo de la industria automotriz genera alrededor de cinco a siete puestos de trabajo a los autopartistas”, enfatizó Xavier León, de la compañía Ciauto. “Nosotros creímos en el sector, invertimos para generar autopartes, pero hoy no existen los mecanismos para incentivar la producción. No hay un incentivo empresarial”, manifestó Javier Espinosa, presidente de Metalcar, quien agregó que actualmente el 80% de las factorías fabricantes de piezas trabajan a un solo turno, es decir ni a la mitad de su capacidad. (I)