“Fue una locura hermano, más de 40 horas de vuelo… Un martirio, pero el guitarreo del Presi lo hace más llevadero”. Xavier Hervas, ejecutivo de la empresa exportadora de brócoli congelado Nova SA, narra como una aventura su presencia en la delegación que acompañó al presidente Rafael Correa a distintos países asiáticos en 2010. El empresario capitalino tiene varias anécdotas ya que en distintos años ha acompañado al Mandatario a destinos como China, Chile, Japón, Corea, Alemania e Italia. Ahora se embarcó en el vuelo chárter de Tame que lo trasladó, al igual que a otros 39 empresarios, hacia Rusia, a Bielorrusia y lo llevará a Francia, tres mercados que, a pesar de su gran poder adquisitivo, aún no son explotados de la mejor manera por Ecuador. El avión partió de Tababela, al límite, tanto de pasajeros como de carga. En sus entrañas la aeronave transportaba una gama de productos para ser colocados en las manos de empresarios europeos. La primera parada para reabastecer combustible fue Fortaleza, Brasil. En la espera subió otro invitado, el embajador de Ecuador en Brasil, Horacio Sevilla. Con su bonachona apariencia fue de puesto en puesto saludando a los empresarios, ya con algunas horas de viaje encima. El diplomático, sin poses oficiales, comenzó a dialogar de tú a tú con los presentes. Con paciencia explicó que el Gobierno Nacional está negociando para que el mercado brasileño sea más accesible para los ecuatorianos, sobre todo en aspectos fitosanitarios. Uno que otro comentario “off the record”, una que otra duda resuelta y Sevilla dejó el avión… a los empresarios les esperaba un viaje de al menos 18 horas más. Ya en Rusia, el domingo anterior, los empresarios se separaron inclusive de la misma delegación de autoridades ecuatorianas. Los ejecutivos cuentan con una agenda particular y exclusiva en su estadía en Europa. El mensaje es claro: son invitados especiales. Los propios empresarios reconocen este estatus. Susana Tamayo, que llegó a Europa para promocionar su producto "Kucker" de chifles y barras energéticas hechas de banano, no esconde su emoción al formar parte por primera vez de una gira empresarial. Ella confía en que ser parte de una delegación oficial es un "plus" que les da más credibilidad a la hora de promocionarse ante potenciales compradores extranjeros. Y es justamente este último punto el que diversos niveles del Gobierno buscan explotar en esta nueva gira. Manuel Echeverría, director ejecutivo de Proecuador, fue el encargado de formalizar ese contacto entre empresarios ecuatorianos y rusos. Fue así que se realizó la rueda de negocios en World Trade Center de Moscú. Ashley Delgado, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Café (Anecafe), es un poco más escéptico sobre los resultados de este tipo de eventos. Afirma que estas oportunidades son únicas, pero que son “solo de reconocimiento, algo para recién conocernos” con los vendedores europeos. El empresario asegura que ninguna de estas gestiones funcionarán si en las altas esferas no se concretan acuerdos para mejorar las condiciones arancelarias a favor de los ecuatorianos. Sobre este punto, el ministro de Comercio Exterior, Francisco Rivadeneira, tiene novedades. El funcionario recordó que por temas de conveniencia no se podía firmar un acuerdo comercial directo con Rusia porque éste no era miembro activo de la Organización Mundial de Comercio (OMC). Ahora que ya integra esta instancia se han empezado negociaciones, pero en el interín surgió un nuevo inconveniente: Rusia ahora integra una unión aduanera junto con Bielorrusia y Kazajistán. Es decir que Ecuador, si quiere llegar a un acuerdo con Rusia, también tendrá que negociar con los otros dos países de esa unión aduanera; pero éstos no forman parte de la OMC. “Pero para no perder tiempo, tuve una reunión con el presidente de la Comisión Euroasiática, instancia que maneja la unión aduanera, para realizar, primeramente, pruebas de factibilidad, para analizar los costos y beneficios de negociar un acuerdo con estos países”, explicó el funcionario. Pero paralelo a estas negociaciones, el Gobierno también está solicitando a la Federación Rusa que cumpla con los compromisos adquiridos hace pocos años. Ecuador, a través de la OMC, alcanzó un acuerdo para que Rusia aplique una reducción arancelaria de productos estrellas como el banano, flores, entre otros. El pacto establece que Rusia tendrá que cumplir con estas disposiciones hasta septiembre de 2014 (dos años después de su ingreso a la OMC). Estas novedades tranquilizaron a más de uno de los empresarios que estuvieron ayer en Moscú buscando compradores de sus productos. Si bien hay muchos que aún están temerosos por el futuro a mediano plazo una vez que se concretó el cese de las preferencias arancelarias con Estados Unidos, saben que la Unión Europea y los países asiáticos son los mercados a los que deben apuntar lo más pronto posible. “Hay que sacarle provecho a este tipo de oportunidades cuando se forma parte de la delegación del Presidente. No es lo mismo acercarte a un cliente cuando te sientes respaldado por una comitiva oficial”, reitera Hervas, quien mientras conversaba con un potencial comprador ruso ya pensaba en su estrategia de venta para la siguiente parada de la gira: Bielorrusia.