Argentina cerró el 2017 con una inflación de 24,8%, informó el Instituto Nacional de Estadística (Indec), lo que la coloca como la segunda más alta de América Latina, después de Venezuela. Esta tasa está por encima de la meta de 17% que había establecido el gobierno del presidente Mauricio Macri. La inflación en Argentina había alcanzado 41% en 2016. “Nadie baja la inflación de un día para el otro en un esquema (de reforma) gradualista como el de Argentina”, comentó a la Agencia AFP el economista Ramiro Castiñeira, director de la firma Econométrica. En la calle, la gente muestra escepticismo sobre la posibilidad de contener las alzas de precios. “Siempre se dicen metas, objetivos, y nunca se llega a cumplir. Todos esperamos que vaya bajando la inflación. Pero si bien bajó un poco (en 2017), todavía está desestabilizada”, dijo a la AFP Estefanía Triantafilu, una joven profesional. (I)