Después de 16 años de ausencia, Ecuador inició ayer una nueva etapa de exploración petrolera en la Amazonía, con la entrega de ofertas para la exploración y explotación hidrocarburífera de 13 bloques ubicados en el suroriente, mediante contratos de prestación de servicios. Estudios del Instituto Francés del Petróleo señalan que  existe  una franja potencial de reservas de entre 400 y 1.600 millones de barriles en el suroriente ecuatoriano, una zona con un perfil de producción que ha sido calculado por la Secretaría de Hidrocarburos en 190 mil barriles diarios, cifra que será verificada luego de las respectivas campañas exploratorias. Dos compañías internacionales y la estatal ecuatoriana Petroamazonas, en consorcio con Enap de Chile y Belorusneft de Bielorrusia, presentaron ofertas para la exploración y explotación de cuatro bloques hidrocarburíferos, que salieron a licitación en la Ronda Sur Oriente. La española Repsol ofertó el bloque 29, la china Andes Petroleum Ecuador Ltd. los bloques 79 y 83, y Petroamazonas el bloque 28. El acto de apertura de las ofertas se efectuó a partir de las 17:00 de ayer, ante representantes de las compañías y líderes de 14 organizaciones de la Amazonía, que respaldaron el proceso licitatorio que culminaría en el primer semestre de 2014  con la firma de los contratos de prestación de servicios. Las propuestas serán revisadas por la Comisión Calificadora y de Evaluación de la Secretaría de Hidrocarburos y luego se abrirán los sobres 1 y 2 de las ofertas. Las negociaciones podrían durar unos cinco meses, se anunció. DATOSEcuador quiere ampliar su horizonte petrolero encontrando nuevas reservas, que hasta el  momento se cuantifican en 6.000 millones de barriles.La producción nacional de crudo, que a inicios de 2012 estaba por debajo de 500 mil barriles diarios, hoy supera los 540 mil.El petróleo financia alrededor del 30% del Presupuesto General del Estado (PGE). En 2014, el PGE de 34.300 millones de dólares, incluye 6.233 millones de dólares para financiar la importación de combustibles. Un barril nuevo, recién descubierto, toma entre 7 y 10 años en llegar al mercado y monetizarse El gerente de Petroamazonas, Osvaldo Madrid, informó que las socias del consorcio, ambas de origen estatal, serán las que corran con el riesgo exploratorio del bloque 28 y la empresa pública ecuatoriana compartirá las inversiones en las fases de desarrollo de los campos. La licitación fue convocada el 29 de noviembre de 2012 y el cronograma establecido por el Ministerio de Recursos Naturales No Renovables preveía firmar el contrato en este año. De los 13 bloques, cuatro son de opción sísmica y nueve de sísmica y perforación de pozos. Según la Ley de Hidrocarburos y el artículo 3 del reglamento de aplicación de la norma, la Secretaría de Hidrocarburos tiene la facultad de asignar directamente áreas de operación a empresas públicas, así como a compañías de economía mixta. Es por eso que se seleccionaron los bloques 28, 86 y 78 para la operación directa de Petroamazonas, sin licitación. Para el efecto, la estatal debe conformar una empresa de economía mixta con al menos el 51% del paquete accionario.   En las bases del contrato  se especifica que ninguna compañía que se adjudique los bloques podrá ceder acciones y derechos a otras empresas, sin haber cumplido con las actividades del programa del período exploratorio, que dura cuatro años, con posibilidad de extenderse dos años más. A la firma de los contratos, las compañías adjudicatorias deberán invertir  entre  $ 5 millones y  $ 15 millones en planes  de desarrollo de las comunidades del área del bloque. Precisamente, las comunidades se oponen a la licitación, pese a que en el suroriente no existen parques nacionales ni áreas protegidas. No hubo consenso sobre la consulta previa a dichos grupos, que no es vinculante y se basa en el artículo 457 de la Constitución y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo. La última ronda de licitaciones hidrocarburíferas se efectuó en 1997, cuando regía el modelo contractual de participación, en que el Estado era partícipe del 20% de la producción y las compañías privadas se llevaban el 80%.   El de prestación de servicios permite al Estado tener el control del 100% de la producción y una renta del 80%. A cambio pagará a la operadora una tarifa por el nivel de producción de crudo que extraiga, que podría oscilar entre 30 y 40 dólares por barril. La tarifa también toma en cuenta el riesgo exploratorio. Con ello, Ecuador tiene proyectado reactivar la actividad exploratoria en bloques de riesgo, con inversiones que se estiman en 70 millones de dólares por bloque. “El manejo de los recursos naturales se hará con el mayor cuidado al medio ambiente y con absoluta responsabilidad social”, afirmó el ministro de Recursos Naturales No Renovables, Pedro Merizalde. Entre tanto, mujeres amazónicas de as nacionalidades Shuar, Kichwa, Zápara y Huaorani llegaron  nuevamente a Quito para rechazar la decisión del Gobierno de explotar el petróleo en la Amazonía, según la dirigente del pueblo Sarayaku, Patricia Gualinga. La lideresa indígena, en declaraciones a la radio de la Asamblea Nacional, reiteró que para ellas la selva, el agua y la tierra son amenazados por la actividad extractiva.