Las empresas familiares que constituyen entre el 80% y 90% de las compañías en el mundo son un importante motor de crecimiento del producto interno bruto (PIB) y de la fuerza laboral.

En el país, según el primer informe sobre el estudio de la Empresa Familiar en Ecuador, presentado en la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES), el 90,5% del tejido empresarial es de tipo familiar (ver infografía).

Marcelo Andrade, director de la Unidad de Estudios y Desarrollo de Empresas Familiares de la institución educativa, informó también que el 7,9% de las empresas son de propiedad dispersa no familiar y el 1,7% de propiedad desconocida.

La investigación se hizo con base en las 50.000 empresas (entre grandes, medianas, pequeñas y microempresas) constituidas en la Superintendencia de Compañías.

Las cifras revelan que en la Costa, el 90,7% son empresas familiares; mientras que en la Sierra ese porcentaje equivale al 89,8%; en la Amazonía, el 97%; y en Galápagos, el 95,7%.

Juan Carlos Corona, director general del Instituto de la Empresa Familiar de España, y que apoyó el estudio ecuatoriano, explicó que este tipo de empresas son positivas para la economía. “Las empresas familiares tienen una esperanza de vida superior a las demás; por lo tanto, le dan mucha más estabilidad a la economía”.

Corona puso como ejemplo el caso de España. En ese país, las empresas no familiares viven en un orden de cuatro a cinco años. Sin embargo, las familiares tienen un promedio de 32 años.

Sobre la relación entre este tipo de compañías y las autoridades, el experto dijo que deben enfocar sus acciones a favor de las empresas familiares. Una de estas  podría ser una bonificación en los impuestos.

“Aparentemente esto es perder ingresos. En el corto plazo sí, en el largo no, porque si las empresas familiares aprovechan estas políticas para crecer, al final el propio sector público va a salir ganando”, comentó Corona.

Por su parte, Mark Hollihan, gerente de Gobierno Corporativo y Responsabilidad Social de Banco del Pacífico,  dijo que este tipo de estudios sirve para dar sustentabilidad al empresariado del país.

En una segunda y tercera fase del trabajo de la UEES se analizará el aporte económico y social de las empresas familiares en el país. (I)