En las aulas
El coworking de Innobis recibe a emprendedores y auspicia iniciativas
En Cali (Colombia), Claudia Muñoz siempre laboró desde una oficina independiente ofreciendo sus servicios profesionales en el área de negocios y mercadeo.
Y continuó con su actividad cuando llegó con su esposo a Guayaquil, donde arrendaba una oficina por más de $ 900 mensuales, en el nuevo centro de negocios de la urbe.
Había escuchado hablar del coworking, una forma de trabajo que permite a profesionales independientes, emprendedores y Pymes compartir el mismo espacio físico y virtual, pero no asimilaba verse concretando negocios en un lugar compartido.
Incursionar en esa práctica que cobró popularidad en Estados Unidos, en 2005, fue para esta consultora colombiana como “romper paradigmas”.
Desde 2016 Innobis se promueve el emprendimiento y la innovación en Ecuador. “Es excelente para crear vínculos con otros y conocer cómo se mueven los negocios”, anota Norma.
Ella es una de los 30 a 40 emprendedores externos que cada mes laboran de manera independiente en el espacio, según Luis Ponce, jefe de Proyectos del Consorcio Nobis.
En Innobis el mecanismo funciona de dos formas: como sitio de trabajo para quienes tengan la necesidad de una oficina y centro de reunión para los emprendedores que Innobis auspicia en sus convocatorias.
Uno de ellos es Inbrokers, negocio de seguros que Elizabeth Vela abrió en septiembre de 2016. “Tenemos una oficina en el centro, pero vimos la necesidad de estar en el norte por ser este el nuevo sector empresarial. Llegamos aquí para consultar los emprendimientos que respaldaba el consorcio Nobis, sin saber que esto era un coworking. Nos ha ido bien aquí”.
Allí reciben a todo tipo de gestores, desde compañías de seguros, gente que hace software, entre otras áreas. Quienes llegan a Innobis pueden usar las oficinas abiertas y privadas, del auditorio y de la sala de reuniones.
“También les damos acceso a la base de emprendedores que trabajan con Innobis y todo el networking que pueden encontrar aquí”, apunta.
Melisa Salazar, coordinadora de Emprendimiento de Innobis, destaca que los usuarios tienen un espacio lúdico equipado con cafetería, mesa de ping pong y futbolín para compartir y disfrutar con diferentes gestores. “Entre ellos se encuentra algún futuro socio estratégico que puede dar avance al proyecto”.
Emprendimientos auspiciados
La entidad auspicia 17 iniciativas que han resultado ganadoras de las convocatorias trimestrales que realiza Innobis en el año, a nivel nacional.
Los proyectos que más participan son los relacionados con tecnología (desarrollo de sofware) y de consumo masivo (productos de uso personal, naturales, orgánicos y otros).
Innobis apoya a los emprendedores con la “aceleración comercial” y dura 6 meses. Analiza el modelo de negocio y trata de impulsar las ventas. El esquema puede cambiar para cumplir las exigencias de empresas grandes.
“De la misma forma como ayudamos al emprendedor a encontrar un cliente nuevo, que puede ser una de las empresas del grupo (Nobis), damos a la empresa del grupo alguna solución nueva para los problemas”.
Afirma Ponce que desde la primera convocatoria han trabajado con muchos proyectos relacionados con realidad virtual o aumentada para Pronobis, para Mall del Sol; de logística y compras on-line para La Universal. “Al último ganador, que tiene un producto que utiliza panela, lo estamos vinculando con Valdez”.
Salazar agrega que Innobis también tiene una isla para visibilizar los emprendimientos nuevos o con productos pequeños que no pueden ingresar a una cadena. (I)
ALGO MÁS
Planes para todas las necesidades
En Innobis los interesados externos en coworking pueden adquirir planes diarios, semanales, bisemanales y mensuales y hacer uso del espacio el tiempo que sea necesario, con costos desde los $ 19 hasta los $ 149. Más información en: www.innobis.ec
Reglas en el coworking
El sitio www.fayerwayer.com recomienda reglas simples para hacer del coworking un espacio donde todos puedan laborar e interactuar sin problemas. Lo básico es respetar esos principios.
Ser social y ayudar al resto
La vida es más simple para las personas que son amistosas. Cuando compartes una oficina con extraños, ser amigable ayuda a obtener lo que se desea.
Ser autosuficiente
Mantener un mínimo nivel de interrupciones hacia las demás personas. Es recomendable hacer una lista con las contraseñas, claves, teléfonos útiles y todo lo necesario.
La concentración es vital
En los espacios de coworking no siempre es fácil alcanzar la concentración. Por eso es recomendable utilizar un par de auriculares. Nadie espera que un espacio común de trabajo esté absolutamente en silencio o que las personas no tengan conversaciones en un tono de voz normal.
Cuidado con el desorden
Es importante encontrar un lugar en la oficina, hacerlo propio y que el resto así lo identifique. Hay que utilizarlo todos los días para reducir el estrés que implica llegar sin saber en qué lugar trabajar. (I)