El quiteño Luis Casillas llegó la madrugada de ayer (05:00) a Guayaquil para acompañar, como es su costumbre, a la Selección Ecuatoriana de Fútbol para el partido amistoso que ayer disputó contra la Selección de España en el estadio Monumental de Barcelona.    

Casillas es un vendedor ambulante de banderas, gorros y cintillos alusivos al combinado patrio. Lleva más de 12 años dedicándose al comercio informal. Acostumbra ubicarse afuera del estadio Olímpico Atahualpa en las fechas de Eliminatorias al Mundial, pero esta ocasión ameritaba ir a Guayaquil.     

“Cogimos un bus la noche del martes para venir a Guayaquil, a alentar a la Selección y por supuesto ganarnos un dinero vendiendo estas bonitas banderas ecuatorianas”, manifestó “Lucho”, quien al enterarse de que en el cuadro español hay un portero que se llama Iker Casillas, bromeó y aseguró que “atajo más penales que él (Iker) en mi barrio”.

Casillas no pudo presenciar el encuentro atractivo entre la campeona del mundo y EcuadorEste quiteño de 39 años vino acompañado por Verónica Figueroa; ambos llevan más de una década trabajando en la venta de banderas. Acá, en el Puerto Principal, se juntaron a Luis Criollo, quien se considera el “cacique” de la zona del estadio Monumental.

“Yo no falto a ningún partido del ‘Ídolo’, por eso me conocen a mí de esa manera", expresa Criollo, quien les  dio  una mano a sus colegas vendedores de la capital. Los puntos para vender son estratégicos, considera Criollo. “Acá tienes que saber ubicarte para obtener más clientes; eso, además de que tienes que gritar a todo pulmón para llegar al comprador”, manifestó.

Hasta el mediodía, el negocio no iba muy bien, pero los tres vendedores aseguraron  que con el pasar de los minutos las ventas iban a aumentar y es que, como ellos mismos indicaron, los precios de los productos que ofrecen a los hinchas “están baratos”.

Los valores de las banderas van desde los 5 hasta los 8 dólares, dependiendo del tamaño de las mismas. “Pero si el cliente adquiere dos, de las grandes, se las podemos dejar hasta en $ 10 el par”, comentó Verónica, quien hasta las 14:00 de ayer  era  quien más había vendido. “A mí me gusta enganchar al cliente, por eso les ofrezco -de una- que lleven las dos”, agregó la vendedora ambulante.

Los negocios de  máscaras y gorros estilo gallito fueron  los que más ganancias dejaronAl parecer, el negocio de las máscaras y gorros estilo gallito es el que más ganancias dejó a los comerciantes, así mencionó Criollo, quien se “avispó” al haber encargado cien gorros de gallito con los colores de la Selección. “En este negocio, la competencia es grande, por eso no  hay que enfrascarse en vender solo un artículo; hay que tener variedad”, aseguró el guayaquileño, que gracias a este medio logra sustentar la comida en su hogar, para sus dos hijos y otros  gastos de su familia.

Casillas no pudo presenciar el encuentro atractivo entre la campeona del mundo y Ecuador, pero auguró que será un buen espectáculo y la “Tri” se llevaría un triunfo.

Además, aseguraron los tres expendedores que el país se clasificará al Mundial de Brasil 2014 y que de seguro en el próximo partido de la Tricolor frente a Uruguay -por eliminatorias-, que será en el Atahualpa, esta pareja quiteña y tal vez “Lucho” estarán en la capital, con la “piel puesta”, ofreciendo a los hinchas banderas, cintillos, gorros y camisetas alusivas a la Selección.

El viaje de vuelta de los quiteños era largo. Así como pasaron mala noche para llegar a Guayaquil, eran conscientes  de que en horas de la noche volverían a soportar el mismo trajín cuando emprendieran su retorno a casa, donde los esperan sus hijos.

Con ellos tienen previsto compartir las ganancias de las ventas obtenidas en el partido considerado por muchos como el más importante del año, ya que Ecuador se midió al campeón mundial que ha venido hasta Sudamérica a jugar la Copa Confederaciones y ahora ante la tercera selección ubicada en la clasificación de las Eliminatorias mundialistas de la Conmebol  rumbo a Brasil 2014.

Casillas solo es uno de los cientos de vendedores que se apostaron en las afueras del estadio Monumental desde la mañana de ayer para ofrecer sus productos y obtener beneficio económico que  les permitan ayudar a sus familias.

Los hinchas ecuatorianos empezaron a llegar al escenario “amarillo” desde las 10:00. Algunas personas interrumpieron sus actividades diarias para ver a la Tricolor.