El año futbolístico está por terminar para los jugadores que están en la actual selección. Los que actúan en el torneo local se encuentran en la recta final  y a los que militan en Europa aún les resta la mitad de sus campeonatos.
La carga de partidos ha sido intensa en la culminación de 2011 y ahora deben cumplir con la “Tri”.

Fernando Saritama, volante del líder Deportivo Quito, ha jugado hasta el momento 35 partidos con los “chullas”, solo en el torneo local. “Físicamente me siento bien. En la parte final del año se ve qué tan bien uno cumplió con la pretemporada y afortunadamente no he tenido complicaciones”, expresó.

Ese no fue el caso de Cristian Noboa, del Rubin Kazán, quien llegó el sábado pasado a Ecuador y pidió no entrenarse en el primer día de trabajos por la carga de partidos. En el torneo ruso se han disputado 30 fechas y, además, el ex Emelec se encuentra disputando Europa League.

El preparador físico de Ecuador, Carlos Velasco, aseguró que el trabajo con todos los elementos que integran la selección es diferenciado al momento de su llegada. Por ejemplo, Frickson Erazo, Diego Calderón y Alexander Domínguez, que disputaron el lunes pasado el partido entre Liga y El Nacional, hicieron ayer un trabajo de recuperación más ligero que el resto.

Los jugadores “albos” arrastran una gran carga, pues  estuvieron en  la Copa Libertadores de este año y continúan en carrera en la Copa Sudamericana.

Los trabajos físicos desde el domingo pasado, cuando se reunieron  algunos elementos de la “Tri” (todos aún no llegaban), no han sido tan intensos. Velasco es el primero en tomar contacto con los jugadores en la  parte inicial de las prácticas. Trabajos con balón en espacios reducidos y otras tareas recreativas en distintos puntos de la cancha son los ejercicios que realizan los futbolistas.

“Son pocos días (6 para este partido) los que tenemos con los  muchachos y el trabajo físico no puede ser muy exigente ahora. Son jugadores élite y vienen con una buena base física de sus clubes, eso sí ayuda mucho”, dijo.

La altura es otro de los temas que no deja de lado el preparador físico, sobre todo para con los que actúan en Europa, como Jefferson Montero (España), Cristian Noboa (Rusia) y Antonio Valencia (Inglaterra).

“He realizado un estudio de todos los jugadores que militan afuera acerca de  cuántos metros sobre el nivel del mar trabajan. Hay algunos elementos que si juegan a nivel del mar, cuando  vienen acá  (Quito) sufren, aún más cuando hay tan pocos días de trabajo con la selección”, señaló.

Mientras que para los que militan en México es más sencilla la adaptación, porque en ese país los equipos actúan tanto en el llano como en la altura, al igual que en Ecuador. “Esos futbolistas suben a la altura cada dos semanas, o menos, y su adaptación se facilita. Las complicaciones son menores”, añadió.

Ayer, el DT Reinaldo Rueda pudo contar por primera vez con los 24 elementos que convocó. Estaba previsto que ayer por la tarde la selección realizara una práctica de fútbol en el estadio Atahualpa y hoy 08:30 viaja a Asunción.

El jugador del Betis, Montero, dijo que realizó una apuesta con su compañero de equipo Roque Santa Cruz, a pesar de que el delantero “guaraní” no fue convocado. “Si mi equipo gana, él deberá pagar una cena para las personas que yo quiera”, comentó.

Se mantiene la incertidumbre sobre si el atacante Cristian Benítez se recuperará a tiempo de su lesión en la rodilla derecha. Sin embargo, viajará con el resto de sus compañeros.

Al igual que el “Chucho”, Segundo Castillo también se trasladará a Paraguay. El volante del Pachuca debe cumplir un partido más de suspensión y podrá actuar en el juego del martes frente a Perú en Quito. La delegación ecuatoriana se hospedará en el hotel Bourbon Conmebol, propiedad de la Confederación Sudamericana de Fútbol.