Considerado en Inglaterra como el ‘wonderkid’ (chico maravilla), el ecuatoriano Josimar Quinteros, de 16 años, ya está dando de qué hablar en el poderoso club del magnate ruso Roman Abramovich, donde llegó a mediados de año procedente de las inferiores del Barcelona español.

Quinteros nació en Guayaquil el 3 de febrero de 1997, pero se trasladó a Cataluña con su familia cuando tenía cinco años. Desde los ocho comenzó en La Masía y, a partir de allí, su carrera ha ido en ascenso.

El compatriota fichó en junio pasado para el Chelsea luego de muchas especulaciones por parte de la prensa, ya que lo ponían en la órbita del Tottenham Hotspur y el Arsenal.

Este mes, Josimar arribó a Londres para irse acoplando al clima frío y lluvioso de la capital británica.

Al sumarse a un club inglés desde Barcelona, el guayaquileño sigue los pasos de estrellas como Cesc Fábregas, Gerard Piqué y Jon Toral, que brillaron en la Premiership.

De acuerdo a HITC Sport, las principales cualidades de Quinteros son su ritmo de juego, su control del balón y una precisión brillante en los pases. También destacó su habilidad de jugar en ambos laterales, en la defensa, como también en ataque, posición que ocupaba en España.

“Ha sido comparado con sus compañeros, el brasileño Dani Alves; y el ex mediocampista del Aston Villa, el ecuatoriano Ulises de la Cruz, pero las mayores semejanzas parecen ser con el lateral del Manchester United, Antonio Valencia, tanto por su estilo de juego como por su habilidad en el costado derecho”, agregó Mathew Nash, comentarista del HITC Sport.

Para el diario español Mundo Deportivo, Quinteros es un jugador disciplinado, trabajador y humilde, cualidades por las que merece “todo lo mejor en el fútbol”.

Dirigido por el inglés Adrian Viveash, y entrenando en el centro Cobham, la división juvenil de Chelsea se encuentra en la quinta posición de la Youth Academy Premier League, con 26 puntos, tras haber perdido solo tres partidos en la temporada.

Junto a Quinteros, el belga Charly Musonda Jr. también es considerado una promesa a nivel mundial.

Según Andy Swallow, dueño del club inglés Grays Athletic, para estos jóvenes “jugar en Stamford Bridge será como jugar en el Mundial”.