Es su primer llamado a una selección mayor en un proceso eliminatorio. El volante ofensivo Renato Ibarra, con 21 años, es el más joven del combinado que dirige Reinaldo Rueda y uno de los más eufóricos en cada entrenamiento.

Su entusiasmo se mantiene intacto, como cuando jugaba en El Nacional y cumplía las prácticas en el complejo de Tumbaco. Por eso, desde el primer día, una amplia sonrisa lo acompañó en los trabajos en el gramado de la Casa de la Selección.

“Estoy muy orgulloso de ser parte de un equipo de mucha experiencia como esté. Espero hacer bien mi trabajo y poder actuar”, expresó el jugador imbabureño.

Once meses lleva en suelo holandés y de a poco se acostumbra a la cotidianidad de la ciudad de Arnhem. Reconoce que al principio le costó adaptarse a las nuevas costumbres y ante todo ganar la titularidad en el Vitesse.

“Por mi lesión (desgarro muscular en la pierna derecha) al inicio no era parte del equipo, pero cuando me recuperé me gané un puesto y creo que lo he hecho bastante bien”.

Renato hoy se comunica con mayor facilidad con sus compañeros de equipo y sale sin temor a las calles holandesas porque aprendió algo de inglés, aunque no lo domina a la perfección, como él lo espera.

“En los primeros meses me costó mucho el idioma, pero después se me hizo fácil aprender algunas palabras y ahora me manejo mejor”.

Byron, su hermano mayor, fue su compañero en la ciudad holandesa. En junio, cuando retorne al club, sus padres lo acompañarán para conocer parte de Europa.

Así podrá disfrutar del platillo gastronómico que más extraña: el arroz con guandul (especie de fréjol). “Extraño mucho la comida del Valle, pero aquí, mientras esté en Ecuador, me daré modos para probar algo y luego con mi mamá (Clara) ya podré también disfrutar de su habilidad en la cocina en la casa de Holanda”.

De momento, lo que más ha disfrutado su paladar son las pastas que diariamente ingiere tras los entrenamientos. “A las 14:00 siempre nos dan un plato de pastas y algo de pan, que son los alimentos preferidos allá. Me he acostumbrado, pero sigo prefiriendo la comida ecuatoriana”.

En su primer llamado a la selección mayor lo que más le agrada es estar junto a su ídolo, Antonio Valencia, con quien no solo comparte la formación en el elenco de las Fuerzas Armadas, sino también la posición dentro del campo de juego.

Como “Sir” Valencia, Renato es extremo derecho y por eso considera muy poco probable que sea inicialista en los juegos eliminatorios. Pero eso no le incomoda, espera seguir aprendiendo para llegar a destacarse algún día como el “Toño”.

“Siempre he admirado a Valencia y ahora que puedo compartir con él la concentración voy a aprovechar para aprender más de él y de su juego. Es un jugador del que nos sentimos todos muy orgullosos”.

El combinado patrio trabajó ayer en horario vespertino con la totalidad de la plantilla. Oswaldo Minda y Cristian Suárez fueron los últimos en llegar y cumplieron su primera práctica. Hoy la sesión también será por la tarde (16:00) en Monteolivo.(VNH)